La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha asegurado este miércoles que «ni Adif, ni Renfe recibieron notificación alguna» sobre la situación de la vía que ocasionó el incidente de tren por el incendio de Bejís (Castellón). En su comparecencia ante la comisión del ramo en el Congreso para explicar lo ocurrido en dicho suceso, la ministra ha hecho un relato de lo vivido el pasado 17 de agosto en el tren de media distancia que une Valencia y Zaragoza y que salió a las 16.23 de la capital valenciana.
Según Sánchez, Adif autorizó la salida de este convoy sin tener conocimiento de ningún incidente en ninguna de las zonas por las que concurre la vía. De hecho, según ha relatado, «la primera comunicación» que Adif tiene de estos hechos «viene de la maquinista», después de detectar una «intensa lluvia de ceniza y humo» cuando llevaba una hora de trayecto, a las 17.54 horas.
A esa hora, según ha apuntado la titular de Transportes, la maquinista detuvo el tren y comunicó la situación siguiendo el protocolo que, según ha explicado Sánchez, señala que el primero en detectar un incidente que afecte a las infraestructuras «debe comunicar al resto» de partes implicadas la situación para determinar las medidas a tomar. En concreto, ha explicado que la maquinista se puso en contacto con el Centro de gestión del tráfico para preguntar si había algún incendio en las proximidades de la zona en la que se encontraba. Fue entonces, según a apuntado la ministra, cuando Adif tuvo la primera información de esta situación.
SITUACIONES «LÓGICAS Y COMPRENSIBLES» DE ALARMA
La maquinista comunicó entonces que iba a cambiar de cabina y retroceder hasta la estación anterior más cercana, según ha relatado Sánchez, antes de apuntar que desde el centro de gestión se le autorizó «de forma inmediata» esta maniobra. Finalmente, el tren retrocedió hasta la estación de Caudiel en donde estaban ya movilizadas las fuerzas de seguridad y los servicios sanitarios para atender a los heridos ya que, tal y como ha apuntado la ministra, algunos pasajeros presentaban heridas ya que, «en el proceso de cambio de cabina» se produjeron en los vagones «situaciones lógicas y comprensibles» de alarma entre los pasajeros que pidieron abandonar el tren, a pesar de que la maquinista ya les había informado del retroceso.
Esta maniobra se vio retrasada porque algunos de los viajeros tiraron del freno de emergencia e intentaron abrir las puertas del convoy. Esto obligó, según ha explicado Sánchez, a «rearmar» el tren para iniciar su marcha. Además, hubo que ir «recogiendo» a la personas que habían abandonado los vagones e iban «corriendo en las inmediaciones de la vía» con destino Caudiel.
SE CUMPLIERON LOS PROTOCOLOS
En su intervención, la ministra ha defendido en varias ocasiones que tanto Adif, como Renfe «cumplieron con los protocolos establecidos» y ha insistido en que estos dicen que la primera parte que tenga conocimiento «de una alteración de las condiciones», ya sean fuerzas de seguridad o administraciones, es quien debe «avisar a la otra para activar los mecanismos y procedimientos». Sánchez ha indicado que no se había notificado ninguna incidencia en la zona y, de hecho, ha apuntado que el tren que realiza el mismo trayecto y que salió de Valencia a las 12.13 horas ese mismo día realizó su recorrido «sin anomalías ni complicaciones».
Del mismo modo, ha defendido que la maquinista estuviera sola en el tren ya que, según ha explicado, la normativa española, que es transpuesta de la directiva europea en esta materia, determina que para la circulación de un tren solo es necesaria la presencia de un maquinista, excepto que no disponga de comprobación de puerta cerradas en cabina, no tenga megafonía para comunicación con los viajeros o en determinadas situaciones vinculadas a la infraestructura que, según ha precisado Sánchez, no se daban en este caso.
PETICIÓN DE INTERVENTORES EN MEDIA DISTANCIA
A esta situación se han referido en sus intervenciones los portavoces de Teruel Existe y Compromís, Tomás Guitarte y Joan Baldoví, respectivamente. El diputado aragonés se ha referido las diferentes informaciones sobre el número de usuarios que iban en el tren, una situación que, a su juicio, es consecuencia de no poner interventores en los vehículos de media distancia o el hecho de que no haya máquinas que vendan billetes en las estaciones que incluyen estos trayectos.
Su homólogo valenciano, también ha reclamado un sistema para contabilizar las subidas y bajadas que se producen en estos viajes o la propia compra de billetes. Baldoví ha reclamado también «interventores en todas las líneas de media distancia», un sistema que, a su juicio, «los distintos Gobiernos han ido abandonando».
Ante esta sugerencia, la ministra cree que la normativa recoge ya cuándo es necesario un mayor número de profesionales. Aún así, ha señalado que su departamento tiene encima de la mesa «cambios legales» relacionados con la coordinación y comunicación en situaciones de emergencia, con una revisión del protocolo en materia de avisos de riesgo extremo o alto de incendios, el incremento de ejercicios de simulación, una mejor formación del personal, el refuerzo de la información a los usuarios sobre la responsabilidad de los maquinistas y el conceder a la tripulación el estatus de agentes de la autoridad, entre otras medidas. De hecho, la ministra se ha mostrado abierta a que algunas de estas iniciativas se puedan incluir ya en la Ley del Sector Ferroviario que está en tramitación en la actualidad.
ATENCIÓN A LAS VÍCTIMAS
En cuanto a los usuarios afectados por este incidente, la titular de Transportes ha informado de que fueron atendidos en primera instancia en la propia estación de Caudiel y, posteriormente, uno de ellos fue trasladado en helicóptero al hospital valenciano de La Fe, mientras que una decena fueron evacuadas a distintos centros. Dos de ellos aún siguen hospitalizados. Además, a 20 pasajeros se los recolocó en un autobús para que pudieran llegar a sus destinos finales, de forma que el tren quedó vacío hasta las 23.29 horas, cuando se subieron de nuevo los pasajeros que llegaron en autobús desde Teruel para continuar su viaje a Valencia.
Desde entonces, ha asegurado la ministra, Renfe ha mantenido el contacto con las víctimas a las que, además, ha facilitado un número de teléfono para cualquier necesidad. Además, se ha facilitado atención psicológica a quien lo solicitó, que han sido tres personas. Según Sánchez, dos de ellas ya han sido dadas de alta, mientras que una tercera permanece en seguimiento aunque evoluciona favorablemente. También está en seguimiento la maquinista que, según ha informado la ministra, continúa de baja laboral tras el suceso.
PP Y VOX, LOS MÁS CRÍTICOS
Tras la intervención de la ministra, el portavoz ‘popular’ en esta comisión, Óscar Clavell, ha criticado la falta de transparencia de la ministra que, según ha denunciado, «en 20 días solo ha puesto un tuit» sobre este tema. Además, ha reprochado a Sánchez que el incendio de Bejís se podría haber evitado si el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, hubiera hecho caso a los alcaldes de la zona que alertaban del peligro.
«Hemos dado información en los medios correspondientes y el Ministerio del Interior dio explicaciones inmediatamente ya que en ese caso era el máximo responsable de Protección Civil», ha apuntado la ministra, que también ha asegurado que se hicieron limpiezas de vegetación en la zona. Mientras, la diputada de Vox Patricia de las Heras, ha tachado de «culpable» al Gobierno de no informar a Adif y Renfe. Sánchez ha rechazado que se lancen «otras hipótesis» que, a su juicio, son «alarmistas» y buscan crear «una situación de desconfianza» en los servicios públicos.