Los préstamos personales son productos pensados para aquellas personas que necesitan dinero para poder hacer frente a diferentes gastos en un momento dado. No obstante, para poder acceder a estos productos comercializados por las entidades bancarias y financieras se han de cumplir algunos requisitos. En cualquier caso, lo mejor es contar con un buen comparador y simulador de préstamos que compara préstamos de 20000 euros.
¿Qué es y en qué consiste un préstamo personal?
Un préstamo personal es un producto comercializado por entidades bancarias, financieras y de crédito que consiste en la cesión de cierta cantidad de dinero. De esta forma, la entidad prestará una cantidad concreta de dinero al cliente quien, a cambio, deberá pagar una serie de intereses.
No obstante, se ha de tener en cuenta que los préstamos deberán devolverse en un periodo de tiempo concreto y en una serie de cuotas que se habrán pactado previamente en el contrato correspondiente. En definitiva, el cliente deberá pagar no solo el dinero prestado, sino, además, determinados intereses.
¿Qué requisitos se han de cumplir a la hora de solicitar un préstamo?
Para poder conseguir la concesión de un préstamo personal es indispensable cumplir con ciertos requisitos que exigen las entidades bancarias y financieras. Los requisitos que deberán cumplir los clientes son los siguientes:
- Ser mayor de edad, es decir, tener 18 años o más.
- Tener la residencia fiscal en territorio español.
- Tener ingresos suficientes, bien por el trabajo, bien por ser beneficiario de una pensión. Este es, sin duda, el requisito más importante. De esta forma, el cliente deberá percibir un sueldo suficiente para poder afrontar la devolución del préstamo o del crédito.
- Historial crediticio intachable. Es imprescindible que aquellas personas que soliciten un préstamo no tengan deudas pendientes o impagos. Así pues, los clientes que pretenden la concesión de un préstamo no pueden estar inscritos como deudores en alguno de los ficheros de morosos del país como ASNEF, CIRBE o RAI.
- Contrato laboral indefinido. Tan importante como tener unos ingresos suficientes es que estos sean estables y recurrentes. De este modo, las entidades bancarias y financieras analizan el tipo de contrato laboral del cliente que solicita el crédito. Así, los que tengan un contrato de trabajo indefinido o sean funcionarios públicos lo tendrán más fácil para la concesión del préstamo. En el caso de los autónomos, estos tendrán que justificar que sus negocios tienen beneficios suficientes, estables y recurrentes.
Una vez se han cumplido los requisitos exigidos por las entidades bancarias y financieras, el cliente deberá acreditar el cumplimiento de los mismos. De este modo, el interesado en el préstamo deberá presentar ciertos documentos, entre los que se encuentran los siguientes:
- DNI en vigor.
- Últimas nóminas de trabajo en el caso de los trabajadores por cuenta ajena.
- Justificante del pago de la cuota de autónomos y documento que acredite los ingresos recurrentes en el caso de trabajadores por cuenta propia.
- Recibos de las últimas pensiones recibidas.
A la hora de solicitar un préstamo es fundamental tener muy claros qué requisitos se habrán de cumplir. Para ello, lo mejor es contar con la orientación de un buen comparador de préstamos.