Cada día del año, la Iglesia Católica dedica su veneración a varios de los muchísimos santos que se encuentran en el santoral católico, que en un primer momento eran seleccionados por la aclamación o el culto popular, pero que ahora tal designación sólo recae en las investigaciones que realiza el Colegio Cardenalicio y la proclamación recae en el Papa, y el 13 a abril, que este año cae en miércoles santo, celebramos la vida y las obras de San Hermenegildo.
San Hermenegildo
Según se ha podido deducir de los archivos, San Hermenegildo fue hijo de un rey visigodo, de nombre Leovigildo y murió mártir por degollamiento, al negarse a practicar el culto del arrianismo. El culto que seguían los arrianos se fundaba en las enseñanzas de un sacerdote egipcio de nombre Arrio, quien afirmaba que Jesucristo no tuvo igual condición divina que la de Dios. Tales ideas fueron declaradas como heréticas en el Concilio de Nicea del año 325, cuya realización fue ordenada por el Emperador romano Constantino, para poder unificar todas las ideas del cristianismo, del cual surgió el Nuevo Testamento, junto con los cuatro evangelios de Lucas, Marcos, Mateo y Juan.
Luego de su fallecimiento, Arrio fue exonerado, pero posteriormente sus ideas cobraron cierta vigencia, y tuvieron que ser declaradas heréticas nuevamente durante la celebración del Primer Concilio de Constantinopla, que se celebró en el año 381. Estas ideas tuvieron una gran acogida en la España de los Visigodos, aunque comenzó a perder seguidores gracias al crecimiento del cristianismo, con tal importancia que ocurrió una división entre un rey muy importancia, Leovigildo, y su hijo San Hermenegildo, quienes gobernaban la zona que en aquel momento llamaban Bética.
San Hermenegildo se había convertido a la doctrina cristiana, probablemente por la guía de su esposa de origen franco, de nombre Ingunda y de quien, para la época, era el Obispo de Sevilla, a quien hoy conocemos como San Leandro de Sevilla. Se llevó a cabo una rebelión, como consecuencia de la división, que tuvo como fundamento las dificultades por las que estaba atravesando una minoritaria nobleza seguidora de las ideas de arriano, quienes tenían inconvenientes para relacionarse con una gran mayoría católica hispanorromana.
Por esta causa, comenzó una confrontación entre el padre y el hijo, que desencadenaría en un conflicto armado, ya que Leovigildo y San Hermenegildo llegaron a enfrentarse en varias confrontaciones que tuvieron lugar entre los años 582 y 584, que tendrían su punto final cuando San Hermenegildo es capturado, siendo llevado hasta la cárcel de Tarragona. Allí quiso obligársele a que abjurara de su fe católica, y que recibiera la comunión de un obispo perteneciente al movimiento arriano, pero al negarse a ello, su propio padre ordenó que fuera degollado, y esta fue la causa por la cual San Hermenegildo murió mártir a manos de su propio padre.
Pero el 13 de abril la Iglesia Católica celebra también a otros santos y beatos que se encuentran recogidos en el Martiriólogo Romano, que se convirtieron en ejemplo para sus hermanos, de los cuales podemos mencionar a San Carádoco, San Martín I, Santo Sabás Reyes, Santa Quintilla, San Urso de Rávena, Beato Albertini, Beata Ida de Boulogne, Beata Ida de Val-des-Roses, Beato Juan Bernardo Scubilión y Beata Margarita de Meldola.