PNV acusa al Gobierno de España de «alinearse con las ambiciones» de Marruecos de hacerse con la soberanía del Sáhara

El EBB del PNV ha rechazado el cambio «radical e histórico» de la postura del Gobierno de España sobre el Sáhara Occidental, adoptado de manera unilateral, al respaldar las pretensiones de Marruecos de otorgar una denominada «autonomía limitada» al pueblo saharaui. Además, ha acusado al Ejecutivo de Pedro Sánchez de «alinearse, plenamente y sin matices, con las ambiciones» del país marroquí de hacerse con la soberanía del Sáhara.

En un comunicado, la formación jeltzale se ha referido a la carta remitida por el presidente Pedro Sánchez al rey de Marruecos, Mohamed VI, revelada por las autoridades marroquíes, por la que el Ejecutivo español apoya las pretensiones de otorgar una denominada «autonomía limitada» al pueblo saharaui.

El PNV muestra su rechazo ante «el cambio radical e histórico de la postura» de las autoridades del Gobierno de España sobre el conflicto político en el Sáhara Occidental. A su juicio, se trata de «un giro que, desgraciadamente, supone alinearse plenamente y sin matices con las aspiraciones y ambiciones marroquíes de hacerse con la soberanía del Sáhara Occidental y el destino del pueblo saharaui».

Los jeltzales denuncian que la postura del Ejecutivo de Pedro Sánchez «contraviene gravemente» el Derecho Internacional, los principios y valores de la Carta de Naciones Unidas y las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, «que propugnan una solución política justa, duradera y mutuamente aceptada por las partes, que culmine con el ejercicio de libre decisión» de los saharauis «como paso final al proceso de descolonización inacabado».

El PNV destaca que el Estado español, «por razones históricas, políticas y jurídicas, tiene una responsabilidad muy relevante en el conflicto político del Sáhara Occidental». «Ya en 1975, la Corte Internacional de Justicia de La Haya declaró ilegales los ‘Acuerdos de Madrid’. En consecuencia, Marruecos carece de soberanía sobre el Sáhara Occidental y su ocupación es ilegal», subraya.

Asimismo, remarca que, desde hace décadas, en consonancia con la Carta de Naciones Unidas, la ONU ha declarado al Sáhara Occidental como un «Territorio No Autónomo», concepto que «abarca a los territorios cuyos pueblos no han alcanzado todavía la plenitud de su Gobierno propio».

«El del Sáhara Occidental es el único territorio africano cuyo estatuto poscolonial sigue en suspenso. Igualmente, la ONU ha pedido constantemente al Gobierno español que, en su calidad de potencia colonial administradora -también ‘de iure’ desde el auto de la Audiencia Nacional de 2014-, haga los esfuerzos necesarios para que los saharauis puedan ejercer su derecho a la autodeterminación a través de un referéndum», añade.

NI CREÍBLE NI REALISTA

Por ello, señala que «la nueva posición unilateral del Gobierno de España no es ni creíble, ni realista para resolver este conflicto de naturaleza política», en respuesta a la declaración del gabinete Sánchez de que el plan de Marruecos para integrar al Sáhara Occidental en su territorio es «serio, creíble y realista».

«Esta nueva postura del Gobierno español implica la ruptura de los consensos necesarios en asuntos trascendentales en materia de política exterior, y hace oídos sordos a la moción que sobre el Sáhara Occidental aprobó el Pleno del Senado en marzo de 2021 casi por unanimidad -salvo los tres votos de Vox- y en la que se subrayaba que el conflicto político del Sáhara Occidental debía constituir una política de Estado alejada y despojada de controversias y enfrentamientos partidistas, que en nada favorecen la solución política requerida», destaca.

Por ello, reclama que el Estado español y la UE respeten las sentencias del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) que establecen que los recursos naturales de todo tipo del Sáhara Occidental corresponden al pueblo saharaui, «sin cuyo permiso nadie puede disponer» de ellos.

«Cabe recordar las conclusiones del Consejo Europeo del pasado 24 de febrero, a propósito de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, en las que expresamente se alude a que no tiene cabida el uso de la fuerza y la coacción para cambiar las fronteras. Las tensiones y los conflictos deben resolverse exclusivamente mediante el diálogo y la diplomacia», apunta.

El PNV cree necesario también «pedir a todas las partes involucradas conservar la calma y abstenerse de llevar a cabo cualquier acto de violencia, provocación o uso de la fuerza». Asimismo, aboga por «mantener el impulso al proceso político del Sáhara Occidental», y comprometerse «a continuar el proceso de diálogo y negociación, respetando así plenamente los acuerdos concertados con la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO)».

«Los esfuerzos de la MINURSO para mantener el alto el fuego y organizar un referéndum deben ser respaldados al objeto de que cumpla plenamente y con determinación su misión, bajo una hoja de ruta efectiva y urgente, y con compromisos y plazos concretos», manifiesta.

A juicio del partido jeltzale, la Unión Europea debe respetar sus compromisos internacionales, así como sus propios Tratados en todas sus actividades y políticas relativas al Sáhara Occidental, «cumpliendo así el Derecho Internacional e incluyendo una cláusula de Derechos Humanos como elemento esencial de los acuerdos».

«La UE debe asumir su responsabilidad conforme a su pretensión de ser una entidad geopolítica global defensora de sus principios y valores. En este mismo sentido, la Unión Africana debe contribuir a una solución política en los términos de las resoluciones de la ONU, aportando, además, un marco de cooperación y colaboración satisfactorio para las partes en conflicto», indica.

DIÁLOGO Y NEGOCIACIÓN

La formación dirigida por Andoni Ortuzar enfatiza que «el diálogo, la negociación y el acuerdo llevados a cabo de manera constructiva, de buena fe y con una hoja de ruta concreta y conforme al Derecho Internacional, a los principios de la carta de Naciones Unidas y a las resoluciones de la ONU para respetar el derecho a la libre determinación del pueblo saharaui a través de un referéndum, constituyen el único camino para encontrar una solución política justa, duradera y mutuamente aceptada por las partes».

A su entender, «resulta imprescindible acometer sin descanso todos los esfuerzos necesarios para mantener un diálogo y unas negociaciones permanentes, efectivas y productivas».

«Vivimos la tragedia de una población ocupada en su propio territorio y de unos refugiados abandonados, que sobreviven al límite en uno de los desiertos más inhóspitos del mundo. Resulta necesario mejorar la situación humanitaria en el Sáhara Occidental y en los campamentos de Tinduf, y lograr una mayor implicación de la comunidad internacional al objeto de asegurar la asistencia alimentaria y el pleno respeto de los Derechos Humanos, teniendo presentes sus obligaciones en virtud del Derecho Internacional», asevera.

Tras remarcar que el pueblo vasco se ha caracterizado históricamente por su labor humanitaria y solidaria con el pueblo saharaui, el PNV hace un reconocimiento a «todas las administraciones y organizaciones sociales de Euskadi que realizan esta tarea».

«Les animamos a que persistan e incrementen su apoyo al Sáhara Occidental, en la medida de lo posible, como muestra del compromiso del pueblo vasco, de la sociedad civil y de sus administraciones con los valores de los Derechos Humanos, la libertad y la solidaridad», concluye.