El Consell Escolar de Catalunya (CEC) ha aprobado este lunes un dictamen no vinculante sobre el inicio de curso, que incluye una enmienda que pide a la Conselleria de Educación de la Generalitat aplazar un año el avance del retorno a las clases.
Así lo han confirmado al salir del plenario del órgano consultivo tanto su presidente, Jesús Viñas, como Jordi de Carreras, en nombre de las entidades que han propuesto la enmienda que se ha aprobado sobre la moratoria.
Se trata del dictamen preceptivo sobre la orden de calendario, que el CEC debe emitir para esta y otras decisiones de la Conselleria, pero que el departamento no está obligado a seguir, y que se ha aprobado por 24 votos a favor, 18 en contra y 3 abstenciones.
La enmienda, también critica que «una cuestión tan delicada como es la discusión alrededor de la orden de calendario no fue enviada, como resulta preceptivo, al Consell, para ser debatida».
«Es obvio que con el gesto se ha mostrado públicamente que las opiniones, consensos y disensos que pudieran surgir en el seno del Consell pueden resultar indiferentes», lamenta el texto.
Los proponentes han argumentado que no se determinó cómo se financiará la jornada intensiva en septiembre, se reduce el tiempo para «poder hacer una buena preparación del curso» y pide un año de tranquilidad y estabilidad –textualmente– para la comunidad educativa tras la pandemia.
Se pide, durante este año de margen, estudiar el papel de los municipios en la concreción de propuestas educativas y redactar una memoria económica sobre el cambio.
ENTIDADES
De Carreras ha explicado que todos los actores del CEC que no forman parte de la administración educativa han votado a favor de la moratoria o se han abstenido: sindicatos, asociaciones de familias o movimientos pedagógicos.
Ha confiado en que la Conselleria, que recibirá el dictamen el próximo jueves, «respete la opinión del CEC, se le ha estado pidiendo al departamento que la tenga en consideración desde un principio».
POSICIÓN DEL CONSELL
En un comunicado tras la reunión, el CEC ha apuntado que el dictamen «como es habitual recoge aportaciones diversas que no son de consenso».
Así, en la reunión de este lunes, han hecho referencia a «la comunicación, la oportunidad y la negociación» de la orden de calendario.
Viñas ha celebrado que el CEC «ha tirado adelante el dictamen en una situación muy compleja, ha cumplido su trabajo y el Govern decidirá qué tiene en cuenta de cada una de las propuestas».