El presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, ha considerado un «error» la huelga de los transportistas, les ha pedido que defiendan sus derechos «de otra manera», y ha ofrecido a su partido como «mediador» para «conseguir cambios que alivien» la situación del sector.
En una rueda de prensa en Bilbao para dar lectura a una comunicación relativa a la invasión de Ucrania que el EBB ha trasladado a la Asamblea Nacional de EAJ-PNV, Ortuzar se ha referido a la huelga que llevan a cabo los transportistas ante el incremento del precio del gasoil.
Tras subrayar que la huelga es un derecho constitucional y «hay que respetarlo», ha considerado que, «en estos momentos de zozobra mundial, cuando las cosas son tan complicadas y tan difíciles y estamos viendo los efectos de la globalización a lo bestia», pensar que «con instrumentos del siglo pasado y con huelgas de este estilo se van a solucionar los problemas es un error».
Por ello, siendo «consciente, asumiendo y entendiendo la situación de penuria y la dificultad en la que se desenvuelven sectores como el del transporte y otros más como el primario», y siendo también «conscientes de que esta crisis está afectando a muchísimas personas y a sus empleos», ha pedido a los transportistas que miren «un poquito más allá» y defiendan sus derechos «de otra manera», porque, a su entender, «hay posibilidades».
En ese sentido, ha dicho que el PNV se ofrece como «intermediario, interlocutor y actor» para «conseguir cambios que alivien su actual situación», pero, al mismo, tiempo, ha insistido en que, «en este momento, es un error este tipo de acciones» que, «lejos de contribuir a sacar adelante sus reivindicaciones, lo que están haciendo es perjudicarse a ellos mismos y a un montón de sectores y personas que están sufriendo lo mismo que ellos y no tiene la culpa».
BAJADA DE IMPUESTOS
En relación a las medidas que puedan adoptarse para paliar la consecuencias de la subida de precios de la energía, Ortuzar ha señalado que la bajada de impuestos es una de ellas, pero ha advertido que «no hay una sola medida». A su entender, «el Estado español debiera revisar sus previsiones sobre la transición energética» porque «estamos en una situación como la que estamos y todos convenimos que hay que hacer una transición energética, pero hay que vivir el presente también».
En ese sentido, ha considerado que «Europa entera debiera replantearse» este aspecto, porque, «una de las cosas que ha quedado en evidencia es la dependencia energética que tenemos los europeos de fuentes alternativas».
Según ha dicho, «hay que intentar compaginar ese deseo de no tener tanta dependencia energética en el medio largo plazo a través de las energías verdes, con combatir los efectos negativisimos que está teniendo ahora esa dependencia extrema que tenemos de fuera».
«Europa tiene que buscar soluciones globales y, dentro de Europa, España tiene también que hacer sus deberes para que el precio de la luz, la energía y el gas no condicione la actividad económica», ha insistido, para señalar que «los impuestos es una de ellas, pero revisar el mix energético también», porque los impuestos «tendrían una afección limitada, que a corto plazo va más rápida, pero que a medio plazo no es la solución».
