La vicepresidenta tercera, Yolanda Díaz, y el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, han escuchado este viernes las distintas propuestas que han puesto sobre la mesa los partidos del Grupo Mixto del Congreso para atajar la crisis económica acrecentada por la guerra en Ucrania.
Ha sido durante la reunión por videoconferencia en la que han participado los representantes de la CUP, Nueva Canarias, el Partido Regionalista de Cantabria (PRC), Foro Asturias y Teruel Existe. No ha podido sumarse, por problemas de agenda la diputada de Coalición Canarias, Ana Oramas, aunque hará llegar por escrito sus propuestas.
La cita forma parte de la ronda de reuniones abierta por el Gobierno para informar de sus planes para frenar esta nueva deriva de la crisis económica y, durante la misma, ha quedado claro que Ejecutivo no tomará ninguna decisión antes del Consejo Europeo de los días 24 y 25 porque quiere acompasar sus medidas con las de los socios comunitarios.
Así, según han informado fuentes parlamentarias, el Ejecutivo sigue remitiéndose al Consejo de Ministros del día 29 para la adopción de medidas destinadas a bajar el precio de la luz, el gas y la gasolina. Eso sí, públicamente Moncloa admite que éstas se adoptarán haya o no acuerdo en Bruselas.
EL GRUESO DEL PLAN, CENTRADO EN LA ENERGÍA
Según han expuesto Díaz y Bolaños a estos partidos, el 70% de ese plan nacional de respuesta ante la crisis está centrado en el ámbito energético, aunque están estudiando medidas de otro tipo relacionadas con el turismo, el medio rural y la Seguridad Social.
Con todo, el Gobierno sigue sin dar detalles sobre cuál será la fórmula que se elija para abaratar la factura. Sí está clara su apuesta por poner fin al sistema marginalista para la fijación del precio del energía, que el Ejecutivo considera anacrónico, así como que España no puede poner un tope por su cuenta al gas al margen de la UE.
Durante la conversación, los representantes gubernamentales han expuesto la división que hay en Europa entre quienes defienden ‘topar’ el precio del gas y los que prefieren explorar la vía de las ayudas.
ESTO NO ES UN PLAN NACIONAL
En nombre de la CUP y de Nueva Canarias, Mireia Vehí y Pedro Quevedo, respectivamente, han refrendado la idea de acabar con el sistema marginalista y han apostado por poner límites a los beneficios de las eléctricas y subirles los impuestos. Además, los independentistas catalanes han pedido nacionalizar empresas y no sospesar en ningún caso la vuelta al carbón o a fomentar las nucleares.
De su lado, Quevedo ha tachado de «decepcionante» el encuentro y ha denunciado que se hable de un ‘plan nacional’ pero no se ofrezcan medidas más allá del plano energético y, además, no se atiendan cuestiones territorializadas, como las que afectan al archipiélago, en concreto, al turismo.
EL CARBÓN RUSO SÍ SE USA
En nombre de Foro Asturias, Isidro Martínez Oblanca, ha ofrecido su apoyo al Gobierno para buscar acuerdos en el seno de la UE, pero le ha pedido que actúe también en el ámbito nacional reactivando centrales térmicas de generación eléctrica, con la regasificadora del El Musel, en Gijón, y que use carbón español.
En este punto, Martínez Oblanca ha denunciado que hace apenas 15 días se importaron 160.000 toneladas de carbón ruso para la central gaditana de Los Barrios.
El diputado del Partido Regionalista de Cantabria, José María Mazón, ha planteado al Ejecutivo establecer una tarifa de coste y consumo mínimo en los hogares como una de las medidas para abaratar la factura energética. De esta forma, lo que se gaste de más correría a cargo del cliente, lo que, según Mazón, desincentivaría el consumo.