Se acerca la Semana Santa y con ella llega el momento de disfrutar de los más tradicionales pestiños, torrijas y por supuesto, la Mona de Pascua. Esta, como muchas otras preparaciones, forma parte de los platos tradicionales de estas celebraciones y de los días de Pascua.
De la Mona de Pascua puedes conseguir diferentes versiones. Desde las más tradicionales preparadas con una masa simple de harina, huevos, azúcar y sal, hasta las más extravagantes y llamativas con chocolate y diferentes formas.
1Mona de Pascua, sinónimo de tradición
La Mona de Pascua suele consumirse en diferentes regiones de España y más allá de ella también. Este dulce es típico de toda la zona del Mediterráneo y tiene un origen que lo ubica en la época de los moriscos, hacia el año 1500.
El nombre con el que es conocido este tradicional postre, proviene de “munna” o “mouna”, palabra de origen árabe que significa provisión de la boca. Su consumo marca el fin de la abstinencia propia de la Cuaresma y el inicio de la celebración de la Pascua.
Si bien, este postre representa una tradición que se vive desde hace muchos años en diferentes zonas del Mediterráneo, es más frecuente conseguirlo en Valencia y Murcia, región en la que no solo está presente durante la Semana Santa, sino también durante todo el año. En otros puntos de la geografía, también se le conoce bajo otros nombres, como: toña, panquemao o panquemado.