El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha manifestado su intención de ser «extremadamente cauto y precavido» y no va a hacer, ni a decir nada «que enturbie la necesaria paz y el clima de estabilidad y sosiego» para trabajar por la candidatura de los Pirineos a ser sede de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030.
De esta forma, ha dicho, observa «con rigor» lo que le ha pedido el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, que está asistiendo en estos momentos a los Juegos Olímpicos de Invierno en Pekín.
«Soy un militante activo de esta candidatura», ha remarcado Lambán, que ha declinado pronunciarse sobre la información que publica este lunes ‘El Confidencial’, según la cual documentos intervenidos por la Guardia Civil en los registros de la operación ‘Voloh’ revelan que altos cargos de los gobiernos de Quim Torra y Pere Aragonès usaron partidas destinadas a la preparación del proyecto olímpico para adjudicar a dedo contratos de asesoría a políticos y empresarios afines.
Lambán ha dicho al respecto: «Cada vez que en el horizonte surgen acontecimientos de esta naturaleza, uno lo único que tiene que decir es que las cosas, cuando se vean puestas en entredicho, es bueno que se aclaren» y, «si tienen que actuar los jueces y fiscales, que actúen, pero no esperarán de mí, ni daré satisfacción a palabras que supongan conflictos añadidos, ni a intromisiones que como presidente del Gobierno de Aragón no me corresponden en lo que a la política catalana se refiere».