La tractorada convocada por el sector agrario este viernes en la provincia de Sevilla se ha desarrollado con algunos altercados con la Guardia Civil. Estos incidentes se han producido cuando un grupo de agricultores y ganaderos que participaban en la caravana de protesta, que se inició cerca de la localidad de El Cuervo, intentaron cruzar el cordón de las fuerzas y cuerpos de seguridad establecido en el kilómetro 53 de la AP-4.
En este sentido, los manifestantes quisieron continuar por ese punto de la autovía, pese a que estaba limitado el acceso a la AP-4, y los agentes llevaron a cabo algunas cargas para evitar el avance de la concentración, con lo que se vivieron momentos de tensión. Fuentes de las organizaciones agrarias han calificado este episodio como una «trifulca puntual» que solo ha durado «escasos minutos» y señalaron que tras el incidente «empezaron a negociar con los agentes de qué forma podían continuar con la marcha».
El sector agrario ha salido a las carreteras para exigir una Política Agraría Común (PAC) en la Unión Europea «justa», así como «precios dignos que permitan cubrir los costes de producción». Una «llamada de auxilio» de todas las organizaciones de agricultores y ganaderos –Asaja-Sevilla, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) y Cooperativas Agro-alimentarias– «para evitar que la provincia «se vaya al traste».
«Nos están arruinando por día, con costes de producción que se han multiplicado por tres y hasta por cuatro. No podemos cubrir los costes del gasóleo y no tenemos para echar fertilizantes», ha lamentado el secretario general de Asaja Sevilla, Ricardo Serra.
Desde Asaja se han referido también al tema de las importaciones. «Tenemos un problema serio con ello. No están hundiendo el mercado interior y se han dado más de 300 alertas sanitarias en Europa. Además, no hay unidad aduanera y faltan controles».
Las organizaciones también coinciden en criticar los «excesivos márgenes de beneficios» que obtienen las grandes distribuidoras y en las consecuencias negativas de la reforma de la PAC. «Un agricultor con 24 hectáreas de terreno puede llegar a perder unos 15.000 euros con esa nueva Política Agraria Comunitaria».
El sector agrario ha reclamado por todo ello un plan estratégico al Gobierno. «Tenemos un problema de Estado y lo tiene que poner el presidente en el primer renglón. «Si no nos escuchan los políticos, seguiremos con nuestras protestas», ha asegurado el secretario general de COAG Andalucía, Miguel López: «Se hace algo al respecto –en clara alusión a los representantes de las administraciones públicas– o la comarca se va al traste».
La protesta ha contado con la asistencia de unos 4.000 agricultores y ganaderos y medio millar de tractores, según informan desde UPA. Su vicesecretario general, Roque García, ha reclamado que se ponga en marcha cuanto antes la Ley de la Cadena Alimentaria y se reduzca el margen de las grandes distribuidoras «con lo que pagan al sector». «Ahora mismo nos pagan por debajo de los costes de producción, con lo que nos llevarán a la ruina», ha añadido.
De su lado, desde Cooperativas Agro-alimentarias, a través de su presidente en Sevilla, Francisco J. Bernal, se ha puesto el foco en las consecuencias lesivas de la reforma de la PAC. «La provincia de Sevilla es muy rica en cultivos y no nos han tenido en cuenta, a pesar del frente común desde nuestra región, con la Junta y las organizaciones del sector, entre ellas, Cooperativas Agro-alimentarias», ha afirmado su responsable en Sevilla.
En cuanto a las importaciones, Bernal ha destacado que el campo sevilla «reclama que se cumpla con el principio de reciprocidad», al tiempo que ha pedido «producir en condiciones de igualdad que terceros países».