Decenas de personas han llevado a cabo una cacerolada ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) para expresar su rechazo a la aplicación del pasaporte covid, que, en su opinión, supone «una coacción». Igualmente, han protestado por el proceso de la vacunación infantil que se lleva a cabo en los colegios.
La acción ha sido convocada por diversos colectivos, entre ellos Unión Activa Valencia, Triple V y No Al Nuevo Orden Mundial (NANOM).Los asistentes, la mayoría sin mascarilla, se han autodenominado «representantes del pueblo en defensa de los derechos y libertades» y han incidido en que la vacunación no es obligatoria, sino voluntaria, y que «no impide la transmisión del virus».
A su parecer, «la imposición del pasaporte Covid ha resultado un fracaso» y establece «una división entre valencianos vacunados y no vacunados».
Han criticado que el alto tribunal valenciano «avale la imposición del pasaporte Covid» y han calificado a la Generalitat de «gobierno opresor que deja a los ciudadanos sin libertad».