Telefónica utilizará la tecnología de Red Hat e IBM para alojar sus aplicaciones de negocios en una nueva plataforma construida sobre una arquitectura híbrida ‘multicloud’ a la que está migrando los primeros contenidos.
La empresa española migrará primero las aplicaciones internas para poder seguir desarrollándolas y crear nuevos servicios para dar soporte a sus clientes, según un comunicado.
Entre las ventajas que esgrime Telefónica para su elección se encuentran la portabilidad e independencia de la infraestructura, lo que le permite aprovechar mejor las capacidades de computación, operar con cargas más ligeras y soportar nuevas aplicaciones que puedan desarrollarse para ser desplegadas en el entorno ‘cloud’ más conveniente en cada momento.
El uso de esta tecnología refuerza la apuesta de Telefónica por los contenedores ya iniciada con el servicio Cloud Garden, y le permite ofrecer a sus clientes empresariales una solución de servicios desarrollada sobre Red Hat Openshift, adaptada a sus necesidades.
Próximamente, Telefónica extenderá esta arquitectura híbrida a otros entornos donde la firma aloja sus servicios de negocio como centros de datos, ‘clouds’ públicas y el ‘edge’.
«Con este acuerdo estamos trasladando a los clientes el beneficio de dos tecnologías (el software de contenedores y la nube híbrida), cuyo uso creemos que explosionará en los próximos años», ha explicado el director de Tecnología y Transformación TI en Telefónica de España, Fidel Fernández.
Por su parte, el director de cuenta para el Grupo Telefónica, Adolfo Hernández, ha destacado que la nube híbrida se está convirtiendo en una fuerte impulsora de la competitividad empresarial.
«La razón es que este tipo de ‘cloud’ elimina complejidad, dispersión y heterogeneidad de los entornos», ha subrayado Hernandez.
Por su parte, la directora general de España y Portugal de Red Hat, Julia Bernal, ha destacado que el uso de su tecnología permitirá mayor flexibilidad.
Este lanzamiento se une a otros desarrollos llevados a cabo gracias a la colaboración entre Telefónica, IBM y Red Hat, que ha venido creciendo a lo largo del último año como Cloud Garden 2.0.