Es posible que hayas escuchado referencias sobre ambas dolencias, porque eso es lo que son, y lamentablemente se trata de enfermedades cuya condición es crónica, lo cual quiere decir, que una vez que se manifiestan, se quedan para toda la vida.
Por esa razón, no se trata de unas enfermedades que se pueden curar, sino que lo que normalmente hacen los doctores es indicar tratamientos con los que se atacan los síntomas, para mejorar la calidad de vida de aquellas personas que las sufren, por eso es importante que sigas leyendo, para que sepas un poco más sobre cómo se manifiestan y qué puedes hacer ante ellas.
¿Cómo surgen estas dolencias?
Las dos son producto de inflamaciones en las articulaciones, que se acompañan con dolor y una considerable reducción en la posibilidad de movilización de la persona, sin embargo existen grandes diferencias entre ellas.
¿Qué es la artritis?
Se trata de una de las llamadas enfermedades autoinmunes, que es bastante grave porque posee una condición degenerativa, lo cual quiere decir que se irá agravando con el paso del tiempo. Aunque es posible que en su estado menos grave sólo se circunscriba a provocar grandes inflamaciones, por eso es dividida en:
- Artritis de tipo degenerativo, que, como la artrosis, tiene como característica principal causar el deterioro de los cartílagos y la sección ósea de cada articulación afectada, a lo cual podríamos llamar de forma coloquial, un desgaste severo de la articulación afectada.
- Artritis de tipo inflamatorio, que en este caso recibe también el nombre de artritis reumatoide, cuya característica principal es producir la inflamación de una membrana que recubre la articulación y que se conoce con el nombre de sinovial, lo que produce un incremento del calor y del volumen de la articulación afectada.
El caso es que la artritis que llamamos reumatoide es una dolencia de personas jóvenes, ya que puede manifestarse a partir de los veinticinco años de edad y sus síntomas tienen la particularidad de que son sistémicos, esto es, que aparecen de forma localizada en ciertas articulaciones.
La artritis suele presentante en las pequeñas articulaciones, como las que corresponden a la muñeca de la mano o a los dedos, aunque no es infrecuente que pueda aparecer en otros lugares, causando rigidez, dolor y finalmente, deformidad en las articulaciones afectadas, lo que limita en gran medida la posibilidad de movilización de la persona.
Lo interesante de esta dolencia es que se presenta de manera simétrica, esto quiere decir que si se presenta en la articulación de la muñeca derecha, muy pronto sino es que ya, se manifestará en la muñeca izquierda, y es común que afecta a varias articulaciones al mismo tiempo.
Cuando la enfermedad ya se encuentra asentada en la articulación, una de sus características es la presencia de rigidez en las mañanas, por lo que hay que calentar la articulación para poder comenzar a moverla, y lo mismo ocurre cuando pasamos mucho rato sentados sin darle movilidad a los huesos, presentándose dolor en el área afectada.
Esta dolencia puede hacerse presente, como ya hemos indicado, en cualquier etapa de la vida de una persona.
¿Cuáles son las causas de la artritis?
Puede tener múltiples causas, una de las principales es la sepsia o infección que puede manifestarse en una articulación, como consecuencia de una lesión o de otra causa, pero también puede producirse como consecuencia de la acumulación de cristales de ácido úrico, como ocurre cuando se sufre de gota, o porque el organismo de la persona se encuentra comprometido y se produce una enfermedad de tipo autoinmune, que es la causa de la artritis reumatoide.
¿Cuál es el tratamiento para la artritis?
Los efectos de esta dolencia pueden ser muy graves, llegando a disminuir la calidad de vida de las personas que la padecen, por las inflamaciones que producen mucho dolor, por lo que normalmente se recomienda tomar medicamentos antiinflamatorios, y en casos extremos, pueden llegar a prescribirse medicamentos inmunosupresores.
¿Qué es la artrosis?
Se trata de una dolencia que se produce a medida que los cartílagos, que son los tejidos que funcionan como especie de amortiguadores entre los extremos de los huesos subyacentes y que facilitan el movimiento de cada articulación, se van desgastando, por lo que podría decirse que es una dolencia que se presenta por el uso excesivo de las mismas.
La artrosis comúnmente se hace presente en las articulaciones que corresponden a las caderas, rodillas, pies, columna y manos. Sus síntomas se presentan de forma mecánica, lo que quiere decir que se manifiesta cuando nos movemos y, en particular, cuando le exigimos un mayor esfuerzo a la articulación afectada, y suelen desparecer con reposo.
Lo característico de esta dolencia es que suele presentarse en personas mayores, aunque hay casos en los que se ha manifestado a partir de los cuarenta años, y se va desarrollando con el paso de los años, hasta que la articulación afectada es destruida de forma total, además su aparición se hace evidente cuando hay inflamaciones.
¿Cuáles son las causas de la artrosis?
Esta dolencia tiene su origen en el desgaste que sufre por el uso la membrana que actúa como recubrimiento del cartílago que protege las articulaciones y protege a los huesos de la posible fricción como consecuencia del movimiento. Podría decirse que es una enfermedad de deportistas incluso.
¿Cuál es el tratamiento para la artrosis?
Podría decirse que es una dolencia que puede encontrarse potencialmente presente en todos los individuos mayores de sesenta años de edad, pero tiene una mejor prognosis, porque no se trata de una dolencia sistémica, razón por la cual puede ser tratada con medidas que tiendan a reducir el dolor y la inflamación, sin que exista un tratamiento único y específico.
En este caso, se puede hacer uso de la terapia ocupacional, mantener el peso adecuado, infiltraciones en la articulación afectada, terapias de bloqueo neural, no hacer ejercicios que impacten en las articulaciones, tomar los analgésicos y antiinflamatorios que sean recomendados por el médico y, en casos muy extremos, remplazar la articulación dañada con una prótesis.
¿Cuál es peor?
Aunque parezca más agresiva por la descripción y por los posibles tratamientos, la menos dañina es la artrosis, porque su causa es localizable y no tiene su origen en el sistema orgánico del individuo, de modo que no afectará a otros órganos del cuerpo, cosa que si puede pasar con la artritis, pero sin duda, para prevenirla, lo mejor que podemos hacer es cuidarnos, mantener una dieta balanceada, un peso adecuado y hacer ejercicios para mantener a nuestro organismo en forma.
