¿Cápsulas de café caseras? Pues aunque no lo creas trucos para que puedas hacer tus propias cápsulas de forma casera. Es decir un ahorro en cuanto al producto.
Las cafeteras con cápsulas de café se han posicionado en los últimos años como uno de los productos preferidos por los más cafeteros de alrededor de todo el mundo. En su sencillez encontramos uno de los motivo y en el avance de las diferentes marcas que se encargan de proveer las cápsulas de café a la hora de replicar algunos de los sabores más tradicionales, el segundo.
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Es conveniente conocer que la diferencia principal con las cafeteras tradicionales es que en éstas últimas tenemos que ser nosotros mismos los que nos encarguemos de servir el café molido. E introducirlo en el interior de la cafetera, para que podamos obtener finalmente el café.
En las de cápsulas, lo único que tenemos que hacer es introducir la cápsula en el espacio que la cafetera tiene reservado para ello. Y acto seguido, comenzará a salir el café.
¿Cómo es el funcionamiento para colocar las cápsulas de café?
En la gran mayoría de las marcas de cafetera para cápsulas de café, el funcionamiento es muy sencillo. Lo único que tenemos que hacer es llenar el depósito de agua, con el objetivo de que pueda salir el café en las mejores condiciones.
La única precaución que debemos tener en el momento de comenzar a hacer el café es que el depósito cuente con el agua suficiente como para no quedarse sin reservas en mitad del café. Si ocurre eso, lo más normal es que tengamos que repetir el proceso de nuevo.
El segundo paso sería introducir la cápsulas de café en la zona habilitada especialmente para ello. En la mayoría de las cafeteras este lugar es la parte superior de la máquina. Una vez introducido, tenemos que elegir el tamaño del café, si lo queremos largo o si, por el contrario, queremos un cortado.
Una vez escogido, la máquina se pondrá sola en funcionamiento y comenzará el proceso de mezclar el agua con el café por medio de su circuito interior.
En la gran mayoría de las máquinas las cápsulas de café restante se desecha en un espacio interno especialmente habilitado para ello. Una vez realizado el proceso, queda lo más importante: disfrutar de nuestra bebida favorita.
Eso es todo, sin embargo y con todo el tema del cuidado ambiental muchos han considerado que las cápsulas de café deben ser útiles. Incluso se han hecho campañas para que estas seas recicladas y tengan una segunda utilidad y no contaminar el medio ambiente.
Pero ahora bien, enfocados en el tema de las cápsulas de café ¿cómo es posible hacerlas de forma casera y reutilizarlas?
¿Cómo rellenar cápsulas de forma casera?
Primero que nada hay que dejar en claro que estos trucos se hacen bajo responsabilidad de la persona. No se recomienda que esto sea de utilidad constante ya que las cápsulas de café fueron diseñadas para usarse una sola vez en la máquina de hacer café.
Por lo tanto estos trucos se hacen de acuerdo a la decisión de cada persona. Además no hay forma de realizar cápsulas para que puedas colocar en la cafetera ya que estas tienen un modelo y un tamaño específico. Por lo que si intentas colocar algo que no es podría dañar la cafetera.
Hay varias técnicas para rellenar cápsulas de café, pero la mayoría siguen un proceso común. Solo se debe cortar la parte inferior de la cápsula, vacíar los restos de café que queden dentro, rellenarla con la mezcla de café que tú quieras.
Posteriormente se debe volver a cerrar y este último paso existen las mayores diferencias. Ya que para sellarlas se puede emplear un trozo recortado de otra cápsula vacía que encaje perfectamente con la primera mitad. Es decir, como si construyéramos una sola cápsula a partir de dos mitades de cápsulas de café diferentes o también utilizando papel de aluminio.
Puedes usar el papel de aluminio como base principal para el proceso de sellado de las cápsulas de café. El principal secreto de este método consiste en prensar muy bien el café al colocar la tapa de papel de aluminio. Esto para que después no queden huecos ni pueda entrar el aire por ningún sitio.
Si quieres reutilizar cápsulas es importante que la tapa quede como si la cápsulas fuese nueva.
Recuerda que los pasos a seguir son:
- Recorta la tapa de plástico con un cúter y vacía el interior de la cápsulas de café.
- Rellénala de tu mezcla de café favorita.
- Tapa con papel de aluminio la cápsula. Es importante que quede todo el conjunto bien sellado.
- Realiza incisiones con una aguja, imperdible o similar, en la tapa de aluminio que acabas de colocar. Esto es para que pueda pasar el agua a presión.
- Vuelve a tapar con papel de aluminio la parte superior de la cápsula. Otra vez es muy importante que quede bien sellado.
Otra opción para cápsulas de café casera
- Recorta la parte inferior de una cápsulas de café sin usar para quedarte tan solo con la mitad de arriba.
- Vacía los restos con cuidado de no romper el plástico ni el interior de la cápsula.
- Recorta una cápsula usada hasta conseguir un trozo que encaje perfectamente en la cápsula que hemos recortado anteriormente. Ahora tendremos dos mitades: la mitad superior (de la primera cápsula) y la mitad inferior (de la segunda cápsula). Asegúrate de que ambas encajan perfectamente.
- Retira el papel de aluminio que hay dentro de la mitad inferior.
- Rellena la primera cápsula recortada con tu mezcla de café favorita.
- Coloca la mitad inferior
- Listo, verifica bien que esté sellada y trata de usar.
