El alcalde de València, Joan Ribó, de Compromís, ha restado este lunes importancia a la exhibición, la pasada semana, de una pancarta de Stalin desde el balcón principal del Ayuntamiento de la ciudad por parte del Partido Marxista-Leninista RC y ha considerado que lo sucedido «huele a ser un poco una culebrilla de verano por no decir serpiente».
En una entrevista en la Cadena Ser, Ribó dice que «no tiene más problema» y ha destacado que durante los seis años que el balcón municipal está abierto a la ciudadanía, con más de 800.000 visitantes, únicamente «se han colgado dos pancartas» fuera de las institucionales que se muestran desde este enclave en apoyo de determinados colectivos o por diferentes celebraciones.
No obstante, el primer edil ha asegurado que se ha dado traslado de la colocación de la pancarta de Stalin a la Policía Judicial y que se ha hecho una «revisión» de ese asunto. La citada pancarta se mostró como «repulsa» a la celebración del Día Europeo de Conmemoración de las Víctimas del Estalinismo y el Nazismo y rechazo a que desde la UE se trate «de equiparar el fascismo con el comunismo bajo la idea del totalitarismo».
Joan Ribó ha comentado que puede colarse un elemento como esta pancarta de «una manera muy sencilla» si no se registra a la gente al acceder al consistorio, ni sus mochilas ni sus enseres. «Una pancarta es un objeto que normalmente puede ser de plástico o de tela, un objeto plegable que fácilmente se puede esconder», ha expuesto.
Si embargo, ha resaltado que el hecho de no registrar a los visitantes del Ayuntamiento de València no quiere decir que no se controle su acceso al edificio, dado que hay arcos e seguridad que se deben pasar antes de entrar.
«No se registra, pero sí que se pasa por un arco donde se detectan explosivos y armas. Que quede claro, no hay un registro físico de las personas pero sí control de posibles armas y explosivos», ha subrayado el Ribó.
El responsable municipal ha agregado que en los seis años que lleva al frente de la Alcaldía de València «han pasado por el balcón del Ayuntamiento más personas que tiene València, 800.000 y pico» y ha insistido en que solamente se han desplegado dos pancartas no institucionales.
«A lo largo de este periodo se han puesto muchas pancartas con el consentimiento y el apoyo del Ayuntamiento, notificándose a todos los grupos –del consistorio–, de temas institucionales, de apoyo a determinados colectivos y a personas son determinadas enfermedades», ha expuesto, tras lo que ha destacado que únicamente «se han colado dos pancartas en seis años».
Joan Ribó ha apuntado que una ha sido esta de Stalin y otra, «una pancarta de un grupo totalmente contrario, de la derecha extrema». «Yo creo que tampoco es tan grave», ha aseverado. «No tiene más problema que huele a ser un poco una culebrilla de verano, por no decir serpiente», ha añadido.
A pesar de ello, el primer edil ha afirmado que en todo caso, tras lo sucedido la pasada semana se ha «hecho una revisión de este tema, se ha notificado a la policía judicial y se va a hacer un seguimiento».
DENUNCIA DE VOX
Por su parte, Vox ha anunciado este lunes, a través de un comunicado, que ha denunciado al Partido Marxista-Leninista por colocar «la bandera de Stalin en el Ayuntamiento de València». Esta formación ha presentado una denuncia ante la Fiscalía contra el Partido Marxista-Leninista (Reconstrucción Comunista) «por un delito de desobediencia y enaltecimiento» tras colocar una pancarta «en defensa del asesino y genocida Stalin» el pasado 23 de agosto en el balcón principal del consistorio valenciano.
El presidente de Vox Valencia, José María Llanos, ha manifestado que la colocación de esa bandera además de ser «un menosprecio a quienes fueran víctimas de uno de los mayores genocidas de la historia, contraviene tanto la legislación estatal como la europea».
«El alto tribunal se ha pronunciado respecto a la imposibilidad de utilizar, aún de manera ocasional, banderas no oficiales en el exterior de edificios y espacios públicos» ha apuntado. Asimismo, ha expuesto que no solo «se ha infringido la doctrina» sino que «la pancarta escogida insulta la memoria de millones de personas inocentes que fueron masacradas por los delirios de un probado psicópata».
Por su lado, el vicesecretario jurídico de Vox Valencia y portavoz de la formación en el Ayuntamiento de la capital valenciana, Pepe Gosálbez, ha considerado que la pancarta de Stalin no fue colocada por casualidad.
«El 23 de agosto es el Día Europeo de Conmemoración de las Víctimas del Estalinismo y el Nazismo, lo que hace que este acto revista de mayor gravedad, si cabe», ha aseverado Gosálbez.
El edil ha indicado que pese a que la pancarta «fue colocada por miembros del Partido Marxista-Leninista, los responsables del gobierno valenciano y, más concretamente, su alcalde Joan Ribó, no solo no hicieron lo más mínimo para impedir tal atrocidad sino que no han dado la más mínima explicación ni por supuesto han condenado estos hechos».