El pollo es una de las carnes más versátiles en la cocina; se puede aprovechar para preparar las más diversas recetas, y a su vez tiene la propiedad de estar recomendada para todos.
Si bien el pollo es sumamente delicioso, fácil de digerir y disfrutar por todas las edades y muy completo a nivel nutricional, el manejo de su carne es bastante delicado y se recomienda una serie de normas para su correcto manejo, descongelamiento y cocción.
A muchos les ha pasado que desean preparar un rico plato con el pollo como estrella, pero olvidaron descongelarlo de la manera correcta. Vaya preocupación la que surge cuando se desea descongelar esta carne de manera rápida; sobre todo porque para muchos es conocido lo delicado que es su manejo sanitariamente.
¿Se puede descongelar el pollo introduciéndose en agua caliente?
A la hora de un apuro, es normal verse tentado por dejar el pollo congelado sobre la encimera, o calentar una olla de agua caliente e introducirlo en ella buscando “acelerar el proceso”. Si alguna vez lo has hecho, no lo vuelvas a hacer jamás.
Cuando el pollo congelado se deja a temperatura ambiente o se introduce en agua caliente, el proceso de multiplicación de bacterias se acelera, lo que termina resultando sumamente peligroso para el comensal.
Lo mejor es prever con anterioridad cuando se va a consumir el pollo, y actuar en consecuencia. Es decir, si piensas preparar el ave el día siguiente, retíralo del congelador y llévalo a la nevera para que permanezca en una temperatura constante desde la noche anterior; de esta manera, se descongelará sin el riesgo de contaminarse.
Cómo NO debe descongelarse el pollo
A la hora de descongelar el pollo, son muchos los consejos que puedes conseguir; y no solo en la web, sino también los trucos más difundidos y transmitidos de generación en generación, esos que las abuelas compartían y que aun en la actualidad son muy utilizados. Sin embargo, ¿son estos métodos seguros?
Lo confieso: yo misma he cometido muchos errores a la hora de descongelar el pollo, porque simplemente repetía los pasos dados por mi abuela o mi madre. Y resulta que ahora al ver tantos estudios que han ido surgiendo y que demuestran lo poco seguros que resultan estos, simplemente puedo admitir que hemos sobrevivido de milagro.
Recuerdo por ejemplo, como mi madre solía colocar el pollo en un recipiente con agua hasta la mitad y dejarlo sobre la encimera por horas hasta que lo preparaba. Igualmente, recuerdo que yo misma para “ahorrar” tiempo, sacaba una pechuga y la llevaba al microondas hasta que se descongelaba, y de hecho muchas veces quedaba cocida por uno de sus lados.
Errores terribles que pudieron resultar en una intoxicación alimentaria o en terminar con salmonelosis… Por eso recuerda esto:
- Nunca descongeles el pollo a temperatura ambiente o en agua caliente. El crecimiento bacteriano es peligrosamente mayor a partir de temperaturas a partir de los 4°C.
- Una vez descongelados los alimentos, no debes volver a congelarlos. La única excepción es si estos se han cocido a más de 70°C por al menos 3 minutos.
¿Qué hay del microondas para descongelar el pollo?
El microondas se ha convertido en todo un aliado de la cocina; en este aparato es posible: calentar, cocinar y por supuesto descongelar los alimentos de forma segura. Ahora bien, en lo que respecta a descongelar el pollo en el mismo, es completamente factible siguiendo algunas recomendaciones.
Para descongelar correctamente el pollo en el microondas, debes introducirlo en un envase apto y seleccionar la opción de “descongelar”. Sin embargo, debes estar pendiente de no excederte en los tiempos, ya que si lo descongelas por demasiado tiempo, el pollo se va a calentar convirtiéndose en un campo perfecto para las bacterias.
Estar pendiente del tiempo es lo mejor que puedes hacer. Para comenzar selecciona dos minutos, y transcurridos estos ve verificando como va quedando. En caso de necesitar un tiempo adicional, déjalo reposar por un minuto y observar bien cómo continúa el proceso.
Nunca permitas que se cocine total o parcialmente mientras se descongela; esto hará que crezcan bacterias en exceso. Si se trata de un pollo entero, debes extremar las medidas de precaución, ya que este costará más que se descongele por completo al mismo tiempo, y dará paso a sobrecalentarse en algunas zonas.
Evita en la medida de lo posible los plásticos dentro del microondas. Es importante que conozcas los peligros a los que te expones al usarlos.
Descongelarlo de manera rápida y sin usar el microondas; un método confiable, rápido y seguro
Si bien descongelar en el microondas es un método realmente rápido, no siempre resulta ser el más conveniente; sobre todo en los casos de descongelar un pollo entero, es mejor buscar maneras que sean menos invasivas y peligrosas y que no expongan al ave a desarrollar un exceso de bacterias potencialmente dañinas.
Para descongelarlo de forma rápida y sobre todo segura, solo necesitas un bol grande, agua fría y bolsas de cierre hermético. El procedimiento es muy sencillo: introduce el pollo dentro de la bolsa hermética y ciérrala muy bien. Coloca la bolsa dentro del bol y vierte agua fría sobre esta hasta llenar el bol.
Con este método, es muy importante que cada 30 minutos cambies el agua para garantizar que esta se conserve fría siempre mientras dure el procedimiento. Existen tres normas básicas que debes tener en cuenta al utilizar esta forma de descongelar el pollo de manera segura:
- Utiliza siempre agua fría. Nunca coloques agua caliente; si lo haces, facilitarás el crecimiento y proliferación de bacterias.
- No permitas que el agua se meta dentro de la bolsa que contiene al pollo. Durante todo el proceso, el agua no debe entrar en contacto con la carne de forma directa.
- Cambia cada 30 minutos el agua por agua fría. La temperatura del agua debe permanecer constante para evitar el crecimiento de bacterias.
Como último consejo, recuerda que siempre que tengas contacto con pollo crudo, debes lavar muy bien tus manos con agua y jabón antes y después de hacerlo. Una vez que tengas descongelado el pollo, sazónalo con las mejores especias y disfrútalo bien asado.
