El vicelehendakari primero y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, cree que un toque de queda puede evitar «incidentes nocturnos», como los que han ocurrido este pasado fin de semana en diferentes localidades de Euskadi en torno a botellones y aglomeraciones de jóvenes que han derivado en enfrentamientos con la Ertzaintza y policías municipales.
Erkoreka, que ha denunciado la actitud «de personas y colectivos que actúan con absoluta irresponsabilidad y una insolidaridad tremenda» en la actual situación de pandemia de la covid-19, ha realizado un llamamiento a «la responsabilidad y solidaridad de la ciudadanía», pero también ha defendido una intervención de la Policía vasca basada en «criterios de eficacia y proporcionalidad».
El vicelehendakari, junto con la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, han asistido a la celebración del décimo aniversario de la planta de energía de las olas gestionada por BiMET e inauguración de la nueva estación océano-meteorológica de la Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet, en el puerto de la localidad guipuzcoana de Mutriku.
El consejero de Seguridad ha recordado que no es la primera vez en esta pandemia que tiene que salir para denunciar «abiertamente» ante la opinión pública la actitud y comportamientos «de personas y colectivos que actúan con absoluta irresponsabilidad, con una insolidaridad tremenda y con una falta de sentido cívico absoluta».
En este sentido, ha apuntado que estos, no solo «se resisten al cumplimiento de las normas que las autoridades de salud pública han establecido para poner freno a la pandemia, sino que, además, enfrentan abiertamente y dificultan la labor de los servicios policiales, que están habilitados, precisamente, para garantizar el efectivo cumplimiento de esa normativa».
Josu Erkoreka ha resaltado que no se trata de «una normativa caprichosa», sino que ha sido diseñada por las autoridades de salud pública y es «homologable a la que está en vigor en muchas otras partes», como en comunidades autónomas u otros países del continente europeo.
Por ello, ha vuelto a realizar «un llamamiento a la responsabilidad y la solidaridad de ciudadanía». «En un momento de dificultad como el actual, en el que las cifras cotidianas de evolución de la pandemia arrojan un resultado francamente preocupante, una preocupación que transmiten el Gobierno y la consejera de Salud, día tras día, cada vez que tiene que dar cuenta de los datos de contagios y del creciente impacto hospitalario, es de una absoluta irresponsabilidad, de una incivilidad sin nombre y absolutamente insolidario seguir actuando con esa insistencia en el incumplimiento», ha insistido.
ACTUACIÓN DE LA ERTZAINTZA
El titular de Seguridad ha señalado que la Ertzaintza actúa con los medios personales que tiene disponibles. Tras explicar que este cuerpo policial no puede tener personal interino, ha precisado que hasta que salga la próxima promoción de la Academia de Policía Vasca y Emergencias, se dispone solo de los efectivos que hay en la actualidad.
«Hay casi 900 efectivos menos de los que correspondería a la plantilla. Cuando concluya el curso actual, dispondremos de más efectivos y, de esa manera, iremos respondiendo al plan de rejuvenecimiento de la Ertzaintza y de adecuación de efectivos a la plantilla oficialmente aprobada», ha añadido.
En cuanto a otros medios, Erkoreka ha señalado que la Policía autonómica vasca debe operar en base a criterios de eficacia, pero también de proporcionalidad. «Estamos hablando, en muchos casos, de situaciones que se producen a elevadas horas de la jornada con concurrencia de muchas personas y muchas de ellas con elevados grados de alcohol ingeridos», ha destacado.
En estas circunstancias, cree que «hay que medir mucho y muy bien» las intervenciones. A su juicio, los mandos de la Ertzaintza «lo hacen manera muy ponderada», determinando «con qué medios intervenir» para que la actuación policial «no produzca efectos contraproducentes, para que el daño que se genere no sea mayor que el que se pretende evitar».
TOQUE DE QUEDA
El vicelehendakari ha explicado que, en base a la experiencia, un toque de queda podría evitar los altercados por la noche. En esta línea, ha recordado que, «mientras estuvo en vigor el toque de queda en Euskadi, no se produjo ningún incidente de esta naturaleza».
«Cuando se producía algún incidente en horas anteriores, automáticamente desaparecía el incidente justo en la hora en la que comenzaba el toque de queda porque todo el mundo tenía perfectamente asumido e interiorizado que, a esas horas de la noche, estaba prohibido andar y todo el mundo respetaba esa disposición. Era un comportamiento generalizado», ha asegurado.
Por ello, ha manifestado que, «efectivamente, un toque de queda en esas condiciones» que ahora no tiene Euskadi, «podría ayudar mucho a evitar los incidentes nocturnos». Según ha precisado, «el verano, con el relajo que trae consigo, las ganas de disfrutar, de salir y compartir, inevitablemente, desembocan» en unas situaciones que podrían impedirse con «medidas legales que impidan jurídicamente» estas conductas.