Los nuevos tratamientos antivirales de acción directa (AAD) pueden curar más del 95 por ciento de los casos de infección por el virus de la hepatitis C (VHC), según un estudio publicado en la revista Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) con motivo del Día Mundial contra la Hepatitis que se celebra el 28 de julio.
Con motivo de este efeméride, la Organización Mundial de la Salud (OMS) solicita a todos los países que colaboren para erradicar las hepatitis víricas, ya que se trata de un problema de salud pública de carácter internacional, y se encuentra dentro de los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, según ha informado Vithas Las Palmas en nota de prensa.
Al respecto, la especialista del aparato digestivo de Vithas Las Palmas, la Dra. Beatriz Rodríguez, ha explicado que la hepatitis C «es una patología que afecta directamente al hígado, causando su inflamación».
Asimismo, ha agregado que en la mayoría de los casos «no presenta síntomas en sus inicios, de ahí que su hallazgo sea casual, por ejemplo, durante una analítica rutinaria», añadiendo que los síntomas clínicos suelen aparecer cuando la enfermedad «está avanzada, es decir, cuando debuta una cirrosis o un cáncer hepático», por lo que entiende que es «fundamental un correcto cribado para su detección y así reducir el riesgo de mortalidad en pacientes que presenten este virus».
En este sentido, el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad «es clave» para combatir una patología que afecta de forma activa a 76.457 personas en España, de las que casi un 30 por ciento no había sido diagnosticada previamente de acuerdo con el II Estudio de Seroprevalencia en España (2017-2018).
Canarias, por su parte, «no» dispone de datos oficiales, si bien los expertos apuntan a que «el patrón epidemiológico es similar al conjunto nacional».
Más de 135.000 personas han accedido a los tratamientos con los nuevos antivirales de acción directa desde el año 2015, tras la aprobación del Plan Estratégico para el Abordaje de la hepatitis C en el Sistema Nacional de Salud (PEAHC), apuntando Rodríguez que desde ese momento «se ha observado una tendencia descendente de la prevalencia de infección activa por VHC en algunas de las poblaciones más vulnerables».
El diagnóstico y el tratamiento de la infección por el VHC, dijo, «suponen un beneficio tanto desde el punto de vista individual como de salud pública» porque permite que se controle su transmisión.
«El tratamiento contra la hepatitis C es de administración oral y presenta una tolerancia muy buena, sin apenas efectos secundarios y, gracias a ello, se está consiguiendo la curación de un gran número de pacientes infectados por el virus», concluyó.