Si hablamos de alimentos versátiles hay muchos, pero como el aguacate ninguno. Muchas veces al escuchar aguacate se viene a la mente el guacamole y nada más; sin embargo este fruto va más allá de las recetas de origen mexicano y se ha adaptado a la gran variedad de menús gastronómicos mundiales dándoles ese toque de cremosidad, frescura y color que lo caracterizan. Tal es el caso del pesto, la salsa italiana que aparte del tono verde, comparte con el aguacate un delicioso sabor.
El pesto, la salsa “machacada” que tanto gusta
Cuando hablamos del pesto inmediatamente nos imaginamos una rica pasta con esta salsa de aspecto ligero y verdoso que impregna con su aroma, color y sabor. Ahora bien, aun cuando es cierto que a esta salsa se le conoce mundialmente bajo ese nombre, este no hace alusión directa a la misma, sino al método de preparación que se emplea para obtenerla.
La palabra pesto deriva de la palabra genovesa “pestare” y esta a su vez significa triturar en un mortero. De esta manera se preparaba la salsa tradicionalmente, machacando muy bien los piñones, hojas de albahaca y dientes de ajo otorgándoles suntuosidad con un chorro de aceite de oliva que terminaba de hacer el ligue perfecto.
Gracias a la movilización constante de barcos a través del puerto de Génova, esta salsa comenzó a ser conocida en el resto de Italia y de allí se extendió rápidamente hacia toda Europa, donde fue admitida entre sus salsas favoritas para acompañar la pasta.
El aguacate, el ingrediente perfecto para preparar un saludable pesto
Son muchos los mitos que giran en torno a la pasta, por años se ha asegurado que esta es uno de los alimentos que hace ganar más kilos y que hacen engordar una barbaridad. Sin embargo nada más alejado de la realidad. La pasta tiene un bajo índice glucémico y en realidad consumida como un alimento frecuente y acompañada de los ingredientes adecuados puede resultar muy beneficiosa para la salud.
El aguacate lo puedes consumir en ensaladas, postres muy ricos como un helado y también como el reemplazo exitoso de algunos aderezos; este fruto va mucho más allá del tradicional guacamole y es una opción increíble para contribuir a la pérdida de peso. Al combinarlo con las pastas, tienes un plato completo y nutritivo en cuestión de minutos.
Todos conocemos muy bien las bondades nutricionales del aguacate; este superalimento tan versátil y delicioso queda bien combinándolo con cualquier otro alimento y por su puesto, la pasta no es la excepción. Utilizándolo para preparar un rico pesto, el aguacate resulta aún más nutritivo gracias a la combinación de sus propiedades con la de los piñones.
Los piñones, ingrediente estrella de la salsa pesto tradicional contienen ácidos esenciales Omega 3 y Omega 6, son una fuente importante de vitamina E, aportan fibra y son ricos en proteínas, mientras que su aporte calórico es realmente bajo. Tal como sucede con el aguacate, los piñones protegen la salud cardiovascular y refuerzan el sistema inmunológico; así que estos dos ingredientes combinados representan para tu pasta la opción más saludable.
El pesto de aguacate, el complemento perfecto para la pasta perfecta
Si bien el pesto de aguacate representa una alternativa perfecta para preparar una salsa realmente nutritiva, existen algunas consideraciones a tener en cuenta para que su combinación con la pasta resulte perfecta.
El tipo de pasta utilizada, su cocción y la forma de servirla serán las claves para una comida espectacular.
La pasta ideal para esta salsa
A cada pasta su salsa suele decirse con mucha frecuencia; y es que, según la textura de esta, existe la salsa que le viene perfecta. Generalmente el pesto es recomendado para acompañar pastas largas y finas a las que se adhiere con mucha facilidad.
En el caso del pesto de aguacate este resulta más cremosito, por lo tanto queda perfecto en pastas como los fettuccine o linguine; así mismo, si de pastas cortas se trata, esta salsa cae perfecta sobre unos fusillis; su cremosidad llenará de forma perfecta cada espacio de la pasta llenándola de sabor.
Para la cocción ideal de tu pasta sigue las recomendaciones del fabricante; sin embargo ten en consideración que el término adecuado de cocción es al dente; de esta manera la pasta y la salsa se integran perfectamente y además la sensación de saciedad durará más tiempo.
Para servirla, el pesto de aguacate debe integrarse completamente con la pasta y esta debe quedar hermosamente verdosa, cremosa y deliciosa.
Cómo hacer el rico y saludable pesto de aguacate
Hacer una salsa para pastas usando el pesto como opción es sumamente sencillo y rápido. En tan solo unos pocos minutos tendrás lista una salsa increíblemente saludable que caerá muy bien con el aguacate que potencia su cremosidad.
Para preparar el pesto elige ingredientes frescos, esta es una salsa con muy pocos ingredientes, así que cuidar los sabores y condiciones de cada uno de los protagonistas será lo ideal.
Toma un aguacate mediano que esté maduro, pícalo, retira su semilla y extrae la pulpa con la ayuda de una cuchara. Vierte la pulpa en la licuadora o batidor eléctrico y añádele 1 cucharada de zumo de un limón; agrega una taza de albahaca, un diente de ajo y ¼ de taza de piñones frescos.
Procesa muy bien todos los ingredientes hasta formar una especie de crema. Si deseas una salsa más líquida puedes añadir agua a tu gusto, añade también un poco de sal y sirve la salsa pesto de aguacate sobre la pasta de tu preferencia, la cual debe estar cocida al dente. Revuelve bien para que la salsa cubra toda la pasta y disfruta.
Si lo deseas puedes añadir también queso parmesano a la preparación. El pesto de aguacate te sorprenderá con su sabor; así mismo, lo más recomendable es disfrutarlo de inmediato para que no se pierdan sus propiedades.
Al hacer esta rica salsa puedes también reemplazar los piñones por unas igualmente saludables nueces, que nada te detenga para comenzar a incluir estos divinos alimento a tu dieta convencional.