Hace un par de meses el abogado Morgan G Moller se percató de que una receta de espárragos gratinados se encontraba publicada nada más y nada menos que en el Boletín Oficial del Estado belga (BOE). Por error hace algunos años, exactamente en el 2014, un trabajador seguramente por error subió la receta, la cual tardó seis años en ser descubierta.
Imagínense estar trabajando seriamente sobre un texto legal que fija los precios de los medicamentos bajo un decreto real y de pronto en medio del trabajo y estando absorto en un tema tan serio, conseguirse entre las líneas del texto con una receta de cocina. Resultó una experiencia muy graciosa sin dudas.
Se tratara o no de un error, mucho debemos agradecerle a aquel trabajador del BOE, pues se encargó de recordarnos lo muy ricos y saludables que pueden resultar unos espárragos gratinados.
Los espárragos, un alimento que merece salir en el BOE
Si bien puede resultarnos algo jocoso que los espárragos hayan aparecido en el BOE belga, esta hortaliza merece haber generado tanto alboroto para que muchos recordáramos sus beneficios. Siendo altamente versátil a la hora de cocinar, los espárragos son muy saludables, cuentan con un alto contenido de fibra, tiene pocas calorías y tiene cualidades diuréticas.
Conseguir espárragos no es nada complicado; en los mercados suelen conseguirse fácilmente, tanto los blancos, los silvestres y los verdes. Los verdes y los silvestres son ampliamente utilizados en diferentes preparaciones gastronómicas, mientras que los blancos son más comunes en conserva debido a sus cualidades de recolectar y manejo.
Sus propiedades nutricionales van más allá de su contenido en fibra, el cual como te comentaba es bastante significativo.
Te contaré un poco sus propiedades:
- Son muy ricos en minerales, como el hierro, el fósforo y el potasio.
- Contribuye a disminuir y mantener en un rango saludable los niveles de colesterol.
- Los espárragos actúan como potentes antioxidantes.
- Bajos en calorías, los espárragos son ideales para las personas con dietas para bajar de peso.
- Mejora la salud del aparato circulatorio.
- Contiene luteína dietética, la cual contribuye a minimizar los riesgos de desarrollar degeneración macular.
Espárragos gratinados, la receta más famosa gracias al BOE
Apenas el abogado Morgan G Moller publicó en su cuenta de Twitter el extraño hallazgo que hizo en el BOE belga, una nutrida cantidad de personas corrió a buscar de qué se trataba, y hasta donde se pudo conocer, el error se había solucionado rápidamente, sin embargo algo quedó en claro, aquella receta contaba con la presencia de tomate y nata.
El chef Samuel Moreno, reconocida estrella Michelin hizo la propuesta de unos espárragos gratinados siguiendo esas premisas, así que vayamos a ella y quizás podamos descubrir si la publicación de la misma en el BOE se trató de un error, o, si el trabajador anónimo la colgó porque al considerarla tan buena sintió como un deber compartirla de una manera tan pública.
Ingredientes que necesitamos
- Salsa de tomates fritos casera 500 ml
- Hueso de jamón
- Pimienta
- Espárragos 500 gramos
- Harina 40 gramos
- Mantequilla 40 gramos
- Leche caliente ½ litro
- Queso manchego
Preparemos las salsas
Para hacer la salsa de tomates fritos casera, será muy fácil siguiendo esta receta: Tomates fritos de verdad. Teniendo la salsa de tomates lista, la llevaremos al fuego junto al hueso de jamón para que esta se impregne con su sabor y aroma, la dejamos reducir y la tendremos lista para usar.
Vamos a avanzar preparando una rica salsa bechamel, comenzaremos llevando a una cacerola sobre el fuego los 40 gramos de mantequilla y cuando esté derretida añadiremos la harina. Con la ayuda de un mezclador de varillas manual integraremos muy bien la harina con la mantequilla para que se vaya cocinando.
Cuando observemos que ya la harina se ha cocido, agregaremos la leche sin dejar de batir y salpimentamos al gusto. Retiramos del fuego y la tenemos lista para usar. Si se te forman grumos, no dejes de revisar cómo solucionar los molestos grumos en la salsa bechamel.
Preparando los espárragos
Cuando tenemos las salsas listas, es el momento de escaldar los espárragos. Para ello pelaremos los espárragos dejando las yemas sin pelar; puedes ayudarte con un pelador de patatas y retirar la parte fibrosa. La parte fibrosa la puedes aprovechar perfectamente para agregarla en un caldo de verduras, verás como aumenta su sabor.
Cuando los tengamos listos, los pasaremos por agua hirviendo por tan solo veinte segundos para que se fije bien el color, los sumergimos luego en agua helada y los reservamos.
Es muy importante no someterlos a una sobre cocción, pues perderán su textura crujiente quedando excesivamente blandos. Si pasarlos por agua hirviendo no te gusta mucho, puedes también saltearlos en un poco de mantequilla, el sabor quedará sencillamente espectacular y la textura quedará genial.
Armando los espárragos para gratinarlos
En una bandeja para horno colocamos una buena cama de la salsa de tomates casera saborizada con el hueso de jamón y colocaremos sobre esta los espárragos para posteriormente bañarlos con la salsa bechamel que hemos hecho.
Una vez que los tengamos colocados en la bandeja y cubiertos con la salsa bechamel, le añadimos el queso manchego rallado por encima y los llevamos a gratinar al horno por tan solo unos minutos.
Tendremos listos unos espárragos tan espectaculares que bien estarían retratados en el BOE y no de forma accidental.
A buscar un buen vino blanco y ¡salud!