La Asociación de Profesional de Suboficiales de las Fuerzas Armadas (ASFASPRO) se ha concentrado este sábado para reclamar «dignidad profesional», denunciar la falta de retribuciones «justas y adecuadas» y pedir el fin de unas nóminas «paupérrimas» que «siempre están en el furgón de cola de la Administración».
La concentración, bajo el lema ‘Carrera y retribuciones dignas’, se ha celebrado de forma simultánea en once ciudades del país, entre ellas Alicante, Córdoba, Madrid, Palma de Mallorca, Zaragoza o Valencia.
En esta última ciudad, en la plaza de los Pinazo, los participantes han mostrado diversos carteles en los que podía leerse ‘No a los ascensos y destinos a dedo’, ‘Preparación, penosidad y peligrosidad deben retribuirse’ o ‘Un policía cobra el doble que un soldado, ¿vale la mitad?’ y han gritado consignas como «Menos medallas más retribuciones» o «¿Qué pedimos? Un sueldo justo. ¿Qué queremos? Equiparación».
Además, han leído un manifiesto en el que han resaltado que «el respeto que merecen los militares, como cualquier profesional, incluye un salario digno» y han exigido que los próximos Presupuestos Generales del Estado incluyan partidas económicas para «iniciar el proceso de dignificación de las retribuciones militares».
En esta línea, el presidente de ASFASPRO, Miguel Peñarroya, ha señalado que la «dignidad profesional se tiene que traducir inexcusablemente en retribuciones justas y adecuadas». «No es concebible que el mismo tipo de trabajo tenga una retribución tan diferente en función del uniforme que lleve la persona que la hace», ha criticado.
No puede ser que un soldado cobre la mitad que un guardia civil o que un sargento de las Fuerzas Armadas con tres años de estudios de nivel superior cobre menos que un guardia civil acabado de salir de su academia con unos meses de formación», ha lamentado.
En este sentido, ASFASPRO ha denunciado que los sueldos de los militares «aumentaron entre 17 y 78 euros hace tres meses, mientras que los compañeros de los cuerpos de seguridad, que ya estaban mucho mejor, han visto aumentada su nómina mensual entre 500 y 600 euros desde 2018». «A su lado, nuestro ridículo aumento parece un desprecio, agravados porque no hay indicios de ir más allá», ha censurado.
La asociación ha calificado de «limosna» este incremento salarial y ha denunciado que el Ministerio de Defensa «ha sido incapaz de diseñar un plan de dignificación de la carrera y las retribuciones militares, al que le instaba ya en 2018 la Comisión de Defensa del Congreso».
«No es que los demás cobren de más, cobran lo que se merecen», ha asegurado el presidente, al tiempo que ha resaltado que el problema es que a los militares «no se nos ha tenido en cuenta y no se valora nuestro trabajo». «Nos denominan impagables cuando deberían decir mal pagados», ha manifestado.
«Ha sido necesario que la pandemia expusiera el buen hacer profesional, la formación y la plena disponibilidad de los militares para todo tipo de tareas en beneficio de la ciudadanía», ha reivindicado, a tiempo que ha señalado que las guardias, el trabajo a turnos, la nocturnidad, la extensión de horarios, la peligrosidad, la preparación técnica, la disponibilidad permanente y la movilidad geográfica «deben retribuirse».
«Muchos se creen que con el uniforme nos dan gratis de comer, pagamos el alquiler y alimentamos a nuestros hijos y eso no es así», ha aseverado Peñarroya. «Al final, morimos en combate o en accidentes en todos los lugares del mundo mientras cumplimos con nuestro deber y eso no se ve recompensado», ha concluido.