La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el aire contaminado mata aproximadamente a siete millones de personas en todo el mundo cada año. Los datos también muestran que 9 de cada 10 personas en el planeta respiran aire que excede los límites recomendados por la OMS para niveles de contaminantes. La contaminación del aire ha sido durante mucho tiempo una de las formas más perjudiciales de daño ambiental.
Un 70% de las emisiones de CO2 provienen del sector transportes, de ahí la importancia de incorporar modelos de combustible alternativos a las flotas de las empresas y acelerar la descarbonización, según pone de manifiesto. La ONU avanza a concienciar sobre la necesidad de una transición a fuentes renovables de energía y del consumo sostenible eligiendo productos y servicios del menor impacto ambiental posible e incorporando una segunda vida a algunos de ellos.
Por eso, el Autogas se está erigiendo como una gran opción: reduce las emisiones de NOx en un 68%, y las de partículas en un 100% respecto a combustibles convencionales. Por ello que está considerado por la Dirección General de Tráfico con la etiqueta ECO. Permite además reconvertir motores diésel en Autogas con una inversión asumible y, España cuenta con la mejor infraestructura para repostar, una clara ventaja frente a los coches de gas natural o eléctricos –actualmente hay más de 600 estaciones de servicio repartidas por todo el territorio nacional, 400 de las cuales son de Repsol-.
Con este combustible ya circulan 27 millones de vehículos en todo el mundo y, durante los primeros meses de 2021, ha ido batiendo récord el incremento de coches vendidos con Autogas. Durante el mes de mayo, se vendieron un 108% más vehículos propulsados por gas (1.258) que en el mismo periodo de 2020 y un 64% más si comparamos con 2019 -dato más fiable debido al estado de alarma en 2020-. El vehículo a gas tiene una cuota de mercado del 1,75%. Y en lo que respecta al periodo acumulado, es decir, entre los meses de enero y marzo de 2021, las matriculaciones de coches a gas nuevos subieron a 4.273 unidades, un 36,78% más que el año anterior.
Securitas Direct es uno de los ejemplos de flotas comerciales que apuestan por el GLP a través de nuevos vehículos de renting de Renault. Han aumentado su flota eco con 786 nuevos vehículos de Autogas -frente a los 40 que tenían en 2019-, lo que supone un gran incremento en solo 2 años y que prácticamente el 30% de su flota se mueve ya con este combustible alternativo. “La apuesta por el Autogas se enmarca en nuestro compromiso con la sostenibilidad y también, nuestro compromiso con nuestros colaboradores, ya que los niveles de ruido se reducen en un 50% frente a un motor diésel y eso se traduce en calidad de vida para ellos”, explica Laura Gonzalo, directora de comunicación y RSC de la compañía. La autonomía y poder circular por los núcleos urbanos sin restricciones son clave para las flotas comerciales.
Si hablamos de reconversión de vehículos, la empresa española BeGas propone la sustitución en camiones y autobuses de los motores diésel por motores BeGas AVG 100% Autogas lo que implica alargar la vida útil de estos vehículos y así cumplir con el reto lanzado por la ONU de uso de combustibles renovables dando una segunda vida a vehículos en activo.
Según Laura Gonzalvo responsable de Comunicación y RSC de Securitas Direct, “los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONUmarcan un reto: no dejar a nadie atrás y garantizar un desarrollo equilibrado en términos de sostenibilidad, medio ambiente, economía y sociedad. Concretamente, el objetivo 12 habla de la necesidad de un consumo responsable y de transitar de una economía lineal a una economía circular y descubrir las posibilidades que ésta ofrece. En el caso del transporte y la movilidad el reto es grande y debe combinar ambas aspiraciones: energías alternativas sí, pero teniendo en cuenta de que es necesario alargar la vida útil de los vehículos si aspiramos a una economía circular.
“Pretendemos contribuir a una transición ecológica justa, inclusiva y eficiente”, declara Pedro Silva, CEO y cofundador de BeGas. Si algo bueno ha traído la pandemia es una mayor conciencia social y medioambiental y esto está acelerando la transformación del transporte urbano hacia tecnologías más limpias para mejorar la calidad de vida de las personas, ya que la contaminación tiene un impacto en la salud y de manera indirecta, también en la economía de los ciudadanos.
Por otro lado, el sector también apuesta mucho por el coche eléctrico como una de las mejores opciones, por su reducido porcentaje de emisiones a la atmósfera. Sin embargo eso pasaría por la renovación completa del parque móvil, que, en el caso de España, tiene una antigüedad media de 12,7 años -frente a los 8 años de media de países como Alemania y Reino Unido-, y ahora mismo no hay garantizada una red de carga eléctrica ni estos coches gozan de largas autonomías que cumplan las necesidades del transporte ni de las flotas comerciales.