El trabajo, los niños, el cole, los oficios y de pronto ya es hora de la comida y no has adelantado nada. Corres a la alacena y ¡allí está!, el arroz blanco que siempre saca de apuros; lo tomas, montas una olla con agua, pones sal echas el arroz lo montas al fuego y sales corriendo a ver qué quiere el niño. Vuelves y vaya sorpresa, en lugar de arroz blanco parece puré…
¿Te suena conocida esta historia?, de seguro que sí, pues aunque cambien los personajes, el entorno y las razones, historias como estas nos han pasado a todos alguna vez.
El arroz blanco suele salvarnos la vida; y es que, este cereal es realmente omnipresente en todos los hogares del mundo, y aunque suele ser versátil y brindarnos soluciones cuando más las necesitamos, muchas veces terminamos cometiendo errores que nos arruinan el plato.
Acompáñame a ver cuáles son esos errores y evítalos, así aunque andes de corre corre, el arroz blanco te quedará perfecto.
Conoce el tipo de arroz blanco
El primer error que debes evitar al preparar arroz blanco es cocinarlos a todos igual. Aunque se parezcan y quizás pienses: “bueno, pero es arroz”, es importante que sepas que el tipo de arroz por supuesto que importa, el tipo de cocción y el uso para el que lo desees dependerá del tipo de arroz que vayas a utilizar.
Arroz de grano corto
También conocido como arroz arbóreo, este tipo de arroz blanco suele ser el ideal para preparar sushi o risotto, el arroz de grano corto tiene la particularidad de aglutinarse entre sí con facilidad una vez alcanzada la temperatura ambiente. Podrás reconocerlo de manera muy fácil; con tan solo verlo, notarás que es casi esférico.
De grano medio
Este tipo de grano es también conocido como arroz bomba; tiene la característica principal, de que al momento de terminar su cocción el resultado será un grano bien cocido y algo pegajoso. El arroz bomba es el más recomendado por los conocedores y es utilizado para
una amplia cantidad de platos; entre ellos: la paella, el arroz con leche, arroces condimentados o al horno.
Arroz blanco de grano largo
El arroz blanco de grano largo también es conocido como basmati. Este grano contiene gran cantidad de almidón y tras su cocción el resultado será un arroz elástico, firme y suelto. Es ideal para platos de arroz al estilo asiático o para ensaladas de arroz.
Bien; ahora que hemos dado un breve paseo por el tipo de grano que encontrarás a la hora de querer preparar un arroz blanco, ya queda más aclarada la duda que te asalta al decidir cuál comprar; ese es el primer paso, ahora veamos cuáles son los errores más comunes.
Errores comunes a la hora de preparar arroz blanco
Los siguientes errores son muy comunes a la hora de preparar arroz blanco, lee con atención y aclara tus dudas para que al momento de cocinarlo te quede como todo un maestro arrocero.
Lavar el arroz blanco
Un error bastante frecuente es lavar el arroz cuando no amerita ser lavado. No todos los granos necesitan ser lavados; y a su vez, dependiendo del uso que vayas a darle puede o no ameritar el lavado previo.
Si deseas que el arroz te quede un poco pegajoso, no es recomendable lavarlo; si por el contrario buscas obtener un grano seco y suelto entonces lávalo antes de llevarlo a cocción.
Usar la cacerola inadecuada
A la hora de preparar el arroz blanco, evalúa si lo quieres seco o caldoso. Si el resultado que buscas es un arroz seco, una cacerola de baja estatura tipo paellera te ayudara a obtener un buen resultado, si deseas un arroz caldoso, utiliza entonces una olla alta.
Cocerlo demasiado o muy poco
Cada arroz tiene un tiempo específico de cocción. En el caso del arroz de grano largo suelen utilizarse 420 ml de agua por cada 250 gramos de arroz y cocer por 10 a 15 minutos, apagar y dejar en reposo completamente tapado.
En el caso del arroz blanco de grano corto, la recomendación es añadir 360 ml de agua por cada 250 gramos de arroz, el proceso de cocción tarda unos 30 a 35 minutos.
Por su parte el arroz de grano medio o también conocido como bomba, se cocina en la proporción: 625 ml de agua por cada 250 gramos de arroz y su cocción dura aproximadamente entre 15 y 20 minutos.
Removerlo durante el periodo de cocción
Si deseas tener un arroz blanco sueltecito evita removerlo durante su cocción, esta práctica libera almidón y hará que el resultado sea un arroz excesivamente pegostoso. En el único caso en el que se recomienda remover, es en el caso de preparar un risotto o arroz cremoso, bien sea dulce o salado.
Comerlo de inmediato
Nos encontramos ante uno de los errores más cometidos por las personas de todo el mundo. Al momento de preparar arroz blanco, no te apures y permite que llegue a su punto ideal aun después de terminar su cocción.
Dejar reposar el arroz por al menos entre 10 y 30 minutos después de apagar el fuego, hará que la humedad se distribuya de una manera más uniforme, lo que conseguirá un resultado con granos más sueltos.
Ahora que conoces cuáles son los errores más comunes que se cometen al preparar arroz blanco, puedes hacerlo de manera perfecta.
El arroz blanco es uno de los alimentos más versátiles y podemos aprovecharlo en innumerable cantidad de recetas, bien sea para preparar un sencillo plato de arroz con vegetales, una paella o un cremoso arroz con leche, este cereal es toda una estrella de la cocina.