Un total de 550 menores llegaron el año pasado a bordo de precarias embarcaciones acompañados de adultos, según datos recogidos de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras.
Se trata de menores que han llegado por vía marítima de forma irregular en circunstancias similares a las que se han podido observar este lunes y martes en Ceuta y que suponen un fenómeno diferente al de los menores extranjeros no acompañados (MENA). El pasado mes de marzo una bebé de dos años llegó de esta forma en estado crítico a Las Palmas y finalmente falleció.
Precisamente, el Defensor del Pueblo viene alertando desde 2013 acerca de la necesidad de adaptar el sistema de acogida humanitaria a las necesidades específicas de los colectivos especialmente vulnerables y recalca que uno de estos grupos, que necesita de una atención más especializada, son las mujeres que llegan acompañadas de bebés o menores de corta edad.
En las visitas no anunciadas realizadas a Canarias en noviembre del año pasado, la institución pudo comprobar la necesidad de mejorar la coordinación entre los distintos organismos con competencias en la materia.
«Desde un punto de vista de control de fronteras, estas mujeres son ciudadanas en situación irregular, interceptadas intentando acceder irregularmente a territorio nacional», señala la institución que dirige en funciones Francisco Fernández-Marugán.
Así, recomienda «erradicar» la detención de estas mujeres junto a sus hijos ya que no está encaminada a un posterior ingreso en CIE, sino que una vez que son puestas en libertad, son derivadas a recursos del sistema de acogida humanitaria que no está preparado para la detección e identificación temprana de las necesidades de estos niños y niñas.
«Se ha avanzado en el diseño de protocolos que tengan en cuenta el enfoque de género en la acogida humanitaria, pero se siguen detectando importantes carencias en protocolos de infancia», advierte el Defensor.
El derecho a la identidad, como el derecho a tener derechos es, a juicio de esta institución, una «asignatura pendiente» en la acogida de estos niños y niñas que debería convocar sin más demora a todas las administraciones.
SEPARADOS A LA ESPERA DE LA PRUEBA DE ADN
Además, la institución analiza en un informe sobre la situación en Canarias la situación provocada por varias separaciones de estos niños de sus progenitores, mientras se recibían los resultados de las pruebas de ADN.
En su respuesta, recibida ya en 2021, la Fiscalía informa de que no se han producido más casos de separación de menores cuyos progenitores portasen documentación acreditativa del vínculo biológico, ya que su criterio ha sido siempre la permanencia de la unidad familiar en el mismo recurso.