UGT y CCOO han valorado positivamente el Plan de Transformación, Recuperación y Resiliencia del Gobierno y consideran que «es una buena hoja de ruta que hay que desarrollar». Además, han destacado que cuenta con aportaciones de los agentes sociales
Tras la reunión de sindicatos con la vicepresidenta segunda y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha apuntado que «los aspectos más conflictivos son muy genéricos, tanto lo que hace referencia al mercado de trabajo como a la Seguridad Social», pero que hay otros aspectos que para el sindicato también tienen importancia.
Así, ha puesto de relieve «la manera en la que se van a distribuir estos fondos, con la participación sindical a la hora de elaborar los planes tanto de las empresas como de las comunidades autónomas, de la capacidad de control y de la repercusión que estos tengan sobre el empleo».
Álvarez, además, ha hecho hincapié en que las empresas que accedan a estos fondos «no solo puedan instruir empleo, sino que el empleo que creen y el que tienen gane en calidad».
En esta misma línea, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha trasladado después del encuentro con Calviño que el Plan «en general» ha contado con una valoración positiva de los agentes sociales «porque canaliza un volumen de recursos económicos que deberían servir para la transformación del modelo productivo y económico español de una manera importante».
También ha apostillado que las reformas asociadas a dicho Plan «en principio responde, al menos a nivel de guión», a los planteamientos del sindicato, tanto en materia de legislación laboral, como de pensiones o de fiscalidad.
«Lógicamente esto es un declaración de medidas, pero falta concretarlas, desarrollar esos espacios de diálogo social, que van a ser indiscutiblemente muy complejos», ha asegurado Sordo, al tiempo que ha recalcado que los términos «parecen compatibles» con las posiciones sindicales en lo referente a la sustitución de la legislación laboral «por una más equilibrada» que haga que la «contratación precaria y el despido dejen de utilizarse de forma sistemática en las empresas españoles».
El responsable de CCOO ha zanjado diciendo que ahora «toca implementarlo a través de medidas de dialogo y de negociación social que van a ser muy complejas en los próximos meses».