Una declaración científica firmada por la Asociación Americana del Corazón advierte de que hay seis complicaciones relacionadas con el embarazo que aumentan el riesgo de que una mujer desarrolle una enfermedad cardiovascular en el futuro, que son: la hipertensión arterial, la diabetes gestacional, el parto prematuro, el alumbramiento de un bebé con peso por debajo de la edad gestacional, la pérdida del embarazo y el desprendimiento de la placenta.
Así, la declaración, publicada en la revista ‘Circulation’, aboga por una prevención «enérgica» de estos factores de riesgo y por la prevención de la enfermedad cardíaca en las mujeres que sufren estas complicaciones cuando pasan de la atención al embarazo y el posparto a la Atención Primaria (AP), con un seguimiento continuo para controlar el riesgo cardiovascular a lo largo de la vida.
Aproximadamente entre el 10 y el 15 por ciento de las mujeres embarazadas experimentan resultados adversos del embarazo, es decir, complicaciones maternas o fetales que incluyen las seis estrechamente relacionadas con el riesgo de enfermedad cardíaca posterior, así como otras medidas relacionadas con la salud del bebé, como el bajo peso al nacer, la edad gestacional elevada y la restricción del crecimiento fetal.
«Los resultados adversos del embarazo están vinculados a que las mujeres tengan hipertensión, diabetes, colesterol anormal y eventos de enfermedades cardiovasculares, incluyendo ataque cardíaco y accidente cerebrovascular, mucho después de sus embarazos», ha expresado la presidenta del comité de redacción de la declaración, la doctora Nisha I. Parikh.
«La prevención o el tratamiento temprano de los factores de riesgo pueden prevenir las enfermedades cardiovasculares, por lo tanto, los resultados adversos del embarazo pueden ser una poderosa ventana para la prevención de las enfermedades cardiovasculares si las mujeres y sus profesionales de la salud aprovechan el conocimiento y lo utilizan para mejorar la salud», recalca Parikh.
Esta exhaustiva declaración revisa la literatura científica más reciente sobre los resultados adversos del embarazo y las enfermedades cardiovasculares, centrándose específicamente en las disparidades de salud, el estilo de vida y las recomendaciones de prevención. «Las pruebas que relacionan los resultados adversos del embarazo con las enfermedades cardiovasculares posteriores son consistentes a lo largo de muchos años y se confirman en casi todos los estudios que examinamos», afirma la doctora. Por ello, la declaración informa de la magnitud del riesgo relacionado con varias complicaciones del embarazo.