De la cocina francesa para el mundo, la tarta Tatín en la sartén es de esos postres que te inspiran a usar el delantal, sacar el arsenal de utensilios de la cocina y disponer de todo cuanto necesites para ponerte manos a la obra. Y existe una forma de hacerla sin horno ni microondas en 20 minutos.
Se dice que su sencillo método de elaboración fue recreado por primera vez en 1889 de las manos de las hermanas Stéphanie Tatín y Caroline Tatín, quienes decidieron colocar una masa encima de unas manzanas que habían caramelizado de más por error, llevaron la sartén al horno y obtuvieron como resultado esta maravillosa tarta de manzana casera que de ellas hereda el nombre y hoy compartimos contigo.
En 30 minutos, y en la sartén
La sola idea de pensar en elaborar recetas que suelen ser muy complejas puede resultar intimidante para aquellos principiantes de las artes culinarias, pero a medida que pasa el tiempo las grandes mentes han abierto un camino de grandes posibilidades ofreciendo elaboraciones sencillas, económicas, saludables y hasta más rápidas que nos parezcan igualmente provocativas y deliciosas. La tarta Tatín es el mejor ejemplo de todo lo descrito anteriormente y es por ello que acá te mostramos la receta completa de este platillo.
Ingredientes de la tarta Tatín
- 4 Manzanas grandes
- 30 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
- 100gr. de azúcar granulada
- 250gr. de masa quebrada
- 1 rama de vainilla
Hacer tu propia masa quebrada en casa no es tan complicado
Por supuesto que es una opción comprar la masa quebrada en el supermercado, no solo agiliza el proceso de cualquier preparación, sino que además es una solución para los temerosos y poco expertos. De hecho, si no consigues masa quebrada igual puedes sustituirla por la masa de hojaldre. Pero si prefieres hacerla tu misma, entonces toma nota de los ingredientes que necesitarás para hacerlo:
Ingredientes de la masa quebrada
- 250 gr. de harina tamizada
- 125 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
- 1 yema de huevo fresco
- 5 gr. de sal fina
- 5 cl. De agua
Modo de elaboración de la masa quebrada
Si decides elaborar tu propia masa quebrada es importante que sepas que debes prepararla el día anterior porque se necesita este tiempo de reposo. Así pues, si tienes en mente hacer varias preparaciones una opción viable es realizar una gran cantidad de la masa, multiplicando la cantidad de ingredientes tanto como requieras, separarla en las porciones que necesites y reservarlas en el congelador.
Para empezar, busca un bol grande y coloca la harina en forma de volcán, luego agrega la sal, la yema de huevo y la mantequilla en el agujero que queda en medio. Comienza a amasar e integrar los ingredientes con la yema de los dedos. Cuando notes que todo está integrado es el momento de incorporar el agua y amasar con rapidez a fin de evitar que la masa se torne elástica. En este punto puedes dejarle el trabajo a una amasadora eléctrica si dispones de una.
Finalmente haz una bola con la masa, separa las porciones que usarás y envuelve cada una en papel film. Deja que la masa repose un rato antes de llevarla al congelador. La cantidad de masa que resulta de esta preparación te servirá para emplearla en un molde de unos 24 cm de diámetro aproximadamente.
Modo de elaboración de la tarta Tatín
Una de las consideraciones a tomar en cuenta para hacer la tarta Tatín es emplear un buen sartén que sea antiadherente o incluso de cerámica para que al momento de desmoldar la tarta no haya inconvenientes. De hecho, hay modelos que te permiten retirarles el asa, y estos son los mejores aliados.
Coloca la masa sobre el mesón de trabajo usando un poco de harina que te permita manipularla fácilmente y estírala hasta dejarla lo más uniforme posible y con un grosor de 4 milímetros. Para cortarla puedes usar un bol o ensaladera que tenga un diámetro mayor al del sartén que estás usando, por lo menos con medio centímetro por encima. Mantenla estirada y lista hasta el momento de cubrir la preparación.
Es tiempo de llevar la sartén al fuego y una vez que esté caliente añadir la mantequilla, la azúcar y la vainilla, que debes haber cortado previamente en forma longitudinal para extraerle la sustancia raspando su interior.
Mantén el fuego medio alto y ve caramelizando el azúcar removiendo constantemente para evitar que se dore demasiado y se queme. Si notas que se empiezan a formar grumos puedes añadir un poco de agua o un poco de zumo de limón y notarás cómo se irán disolviendo.
Cuando el caramelo está listo, apaga la hornilla y retira la sartén, toma las manzanas ya peladas, descorazonadas y picadas en gajos y colócalas encima del caramelo. Considera que debes dejar todo el espacio bien cubierto y que siendo ésta la parte de la tarta Tatín que se verá será mejor hacerlo con gracia.
Lleva nuevamente la sartén al fuego, pero esta vez a una temperatura baja y procede a forrarla con el círculo de masa quebrada que tenías preparado. La masa tiene que permitir una cobertura completa y los bordes se usan para sellar y dar buena apariencia a la tarta. Usa una cucharilla o espátula firme para ayudarte en esta parte.
Abre un agujero en el centro que permita que la tarta respire mientras está en el horno y espera a que el caramelo empiece a escurrirse por los bordes, entonces será el momento de llevarlo todo al horno el cual debía estar previamente precalentado a una temperatura de 200°C.
El utensilio más importante
En este punto es importante que tengas a la mano un plato que tenga reborde, ya que en este tipo de preparaciones el líquido del caramelo se escurre mientras se desmoldan y es seguro que no querrás provocar un desastre ni quemarte. Usa guantes en ambas manos y coloca el plato sobre el sartén, con un movimiento rápido y con firmeza da vuelta y retíralo, deja que la tarta se enfríe y a comer. De seguro querrás preparar más tartas Tatín en el futuro cercano.