Google bloqueó durante el año pasado más de 99 millones de anuncios relacionada con el coronavirus que violaban sus políticas antes de que se difundieran, incluyendo supuestos tratamientos milagrosos, mascarillas FPP2 en momentos de escasez y dosis de vacunas falsas.
La compañía estadounidense ha publicado este miércoles su última versión de su informe anual sobre seguridad en la publicidad, que recoge que Google bloqueó o retiró aproximadamente 3.100 millones de anuncios por violar sus normas en 2020, restringiendo la publicación de otros 6.400 millones de anuncios.
Según ha informado la empresa en un comunicado, Google ha ampliado el uso de tecnologías automatizadas para retirar anuncios de 1.300 millones de páginas de editores, frente a los 21 millones de páginas de 2019. También se detuvo la publicación de anuncios en más de 1,6 millones de webs de editores por ser invasivos u ofensivos.
Entre las nuevas amenazas que han afectado a los anuncios de Google durante 2020, la tecnológica ha destacado especialmente la irrupción de la Covid-19, que le llevó a prohibir la monetización de contenidos a principios de año.
Durante todo 2020, la compañía bloqueó la publicación de más de 99 millones de anuncios relacionados con la Covid, incluidos los de tratamientos milagrosos, mascarillas FFP2 (debido a su escasez) y, más recientemente, dosis de vacunas falsas.
El gigante tecnológico ha ampliado también sus medidas contra el fraude en la publicidad en 2020. El número de cuentas publicitarias inhabilitadas por la violación de sus normas aumentó en un 70%, pasando de 1 millón a más de 1,7 millones.
Google también bloqueó o retiró más de 867 millones de anuncios por intentar evadir sus sistemas de detección o por encubrimiento, y otros 101 millones de anuncios por violar las normas de la plataforma sobre falsedad, lo que suma un total de más de 968 millones de anuncios.
Otro ámbito abordado es la publicidad electoral, y el informe recoge que, a nivel mundial, el programa de verificación de la compañía contó con más de 5.400 nuevos anunciantes electorales verificados en 2020.
Asimismo, Google ha invertido en desarrollar herramientas para desmonetizar el odio y la violencia, y la compañía asegura haber actuado en casi 168 millones de páginas que contravenían sus políticas sobre contenidos peligrosos y despectivos.
