Además de ser un problema molesto, la mala circulación de le las piernas puede ser un indicativo de que algo no anda bien en tu cuerpo. Pero ¿por qué razón se genera la mala circulación? Lo cierto es que existen varias causas y son muchos los factores que pueden provocar el flujo inadecuado de la sangre, algunos de los motivos pueden ser los siguientes:
- Consumo excesivo de bebidas alcohólicas.
- Tabaquismo.
- Alimentos con altos niveles de grasas saturadas.
- Estrés.
- Sedentarismo.
- Obesidad.
- Colesterol alto.
- Presión arterial alta.
- Enfermedades congénitas.
- La edad.
Síntomas de la mala circulación de las piernas
Existen algunas señales que indican la mala circulación sanguínea. Esta afección afecta las piernas y los pies mucho antes de que comiencen a aparecer las primeras señales de que algo no anda bien. El cansancio, los pinchazos y el dolor en los miembros son los primeros síntomas en aparecer. Luego comienzan a manifestarse las señales que se pueden notar a simple vista, los cuales comúnmente suelen ser:
- Las arañas vasculares son algunas de las señales que se manifiestan por la mala circulación de las piernas. Estas son características por su color rojo y por tener el aspecto de una telaraña. Son un indicativo de mala circulación leve.
- Los calambres y sensación de hormigueo es un indicativo de que algo no está bien. Esto ocurre cuando el flujo de sangre se ve obstruido por depósitos de grasa, impidiendo que la sangre fluya con normalidad.
- Las varices son provocadas por el debilitamiento de las paredes venosas, provocando la acumulación de sangre y por ende un ensanchamiento de las venas. Si bien no son graves, la aparición de coágulos puede causar un problema.
- El descoloramiento de las uñas y su engrosamiento es otra señal de que la circulación de tus piernas no está bien. La piel se torna de un color violáceo a causa de la falta de oxigeno. Este es un indicativo preocupante.
- El agotamiento constante y la dificultad para mover es otro indicativo de que la circulación de tus piernas no está bien. Esto puede ocurrir por la falta de nutrientes, lo cual provoca una sensación de pesadez.
- Los cambios de temperatura se debe a que la sangre no circula con normalidad por tus piernas. Esto puede causan un descenso de la temperatura o un incremento de esta en la zona de los pies.
- La resequedad, el endurecimiento o acartonamiento de la piel es otro indicio de que la circulación de las piernas está mal. En estos casos lo mejor es aplicar cremas hidratantes para evitar que se generen heridas.
Estos son los síntomas de que la circulación no está muy bien allá abajo, es por ello que debes estar atento ante la presencia de alguno de estos. Esto se debe a que algunos pueden ser el desencadenante de alguna otra afección, es por ello que si te preocupan pueden asistir a tu médico de confianza.
Mejorar la circulación de las piernas
Para poder prevenir la mala circulación de las piernas existen algunos métodos que podrás poner en práctica:
- Evita estar en la misma posición durante largo tiempo, ya sea al estar sentados o de pie. Lo mejor es mantenerse en movimiento constante o cambiar de posición cada cierto tiempo. Puedes realizar paseos cortos o usar reposapiés.
- Usa medias compresoras cuando necesites estar de pie por mucho tiempo, esto evitará la aparición de varices. Pero antes es necesario visitar a un especialista para valorar el grado de compresión de estas, así como la talla.
- Eleva las piernas, para ello tendrás que acostarte bocarriba y colocar las piernas en alto. Esto es muy bueno para mejorar la circulación luego de estar por mucho tiempo de pie o sentado.
- Cambia tu calzado por uno más cómodo, lo mejor es que sea uno poco ajustado y evitar el tacón muy elevado. Lo ideal es que el calzado transpire y cuente con una buena amortiguación.
- Realizar actividades físicas, el deporte es buenísimo para favorecer la circulación, pues incrementa el flujo de sangre y fortalece las paredes venosas. Actividades como las caminadas, andas en bicicleta, hacer natación y otras rutinas sencillas.
- Mejora tu dieta, pues la mala alimentación puede generar obesidad. Para ello puedes consumir algunos alimentos como los frutos secos, la cúrcuma, las infusiones de limón o cayena. Reducir el consumo de sal es también favorecedor.
- Hidrátate, bebe agua y aplícate cremas hidratantes.
- Masajea tus pies y piernas, especialmente luego de una ducha fría. Esto suele ayudar a reducir la sensación de pesadez e hinchazón.
Tratamiento para la mala circulación
Para tratar los problemas de circulación, es fundamental visitar a un especialista, especialmente si notas algún síntoma. Ten en cuenta que los tratamientos pueden variar según la gravedad de la lesión ocasionada por la mala circulación de las piernas. Pero entre los métodos más frecuentes para tratar esta afección están los siguientes:
- El bypass de safena.
- Las espumas especiales.
- Los fármacos venotónicos y estimuladores de la circulación.
En resumen, es necesario que consultes a tu médico ante cualquier señal que notes. Los pequeños cambios en tus piernas pueden ser un indicativo de mala circulación, aunque también pueden ser una señal de otro problema grave, como las insuficiencias cardíacas, las fallas renales o la diabetes.