La primera exposición de la galería Mayoral en Madrid, ‘Zóbel y grandes artistas de posguerra’, inaugurada este jueves 11 de marzo y que se podrá ver hasta el 21 de marzo en la Fundación Pons, albergará varias piezas, entre ellas un ‘Picasso’ de 1,2 millones de euros, la más cara de la muestra.
Se trata de la obra ‘Photographe et singe’, fechada en 1965. Por el contrario, la más económica de la exposición será ‘Sin título’, del propio Zobel, por 45.000 euros.
La muestra, comisariada por Alfonso de la Torre, es un diálogo entre obras de Fernando Zóbel y otras creaciones abstractas de la posguerra española, entre las que destacan creaciones de Eduardo Chillida, Luis Feito, Juana Francés, José Guerrero, Manolo Millares, Joan Miró, Jorge Oteiza, Pablo Picasso, Gerardo Rueda, Antonio Saura, Pablo Serrano y Antoni Tàpies.
Mayoral es una galería especializada en arte moderno y de postguerra, fundada por Manel Mayoral en Barcelona en 1989. Actualmente está dirigida por sus tres hijos, Cristina, Jordi y Eduardo. «Hacía tiempo que queríamos desarrollar una muestra como esta en Madrid, creemos que es el momento de reforzar nuestra confianza en el mercado del arte de la posguerra española», ha señalado Jordi Mayoral.
La exposición reúne más de una docena de obras de Zóbel y sus contemporáneos, como Zóbel, Chillida, Feito, Juana Francés, José Guerrero, Millares, Miró, Oteiza, Picasso, Gerardo Rueda, Saura, Pablo Serrano y Tàpies, además de fotografías, publicaciones y documentos de la época que rememoran momentos de encuentro entre ellos.
Los galeristas han reivindicado la figura de Zóbel, uno de los grandes artistas de la posguerra, impulsor, además, del Museo de Arte Abstracto Español en Cuenca.Es la primera vez que se hace una exposición en la que Zóbel es el punto de referencia dialogando con los artistas coetáneos.
«Esta exposición permite contextualizar la obra de Zóbel vinculada a algunos artistas abstractos capitales de nuestra posguerra, desde la mirada tutelar de Joan Miró o Pablo Picasso, la muestra explica la posición de Zóbel como centro de energía durante el desarrollo del arte de posguerra», ha señalado el comisario de la exposición, Alfonso de la Torre.
Prácticamente todos los artistas expuestos hicieron de la errancia internacional uno de sus lemas y, así, evocar a Fernando Zóbel es mencionar su ascendencia académica norteamericana, el extenso bagaje desde Oriente y sus viajes en Europa, que trasvasó con extraordinaria generosidad a su llegada a nuestro país a finales de los cincuenta», ha añadido.
Zóbel empezó en 1955 a coleccionar obras de pintores españoles abstractos. La apertura del Museo de Arte Abstracto Español en Cuenca (1966), junto a su colección, supuso un paso adelante para el arte de postguerra.