Los pacientes oncológicos tardan una media de 450 días en acceder a tratamientos innovadores

Actualmente, el promedio de días que tarda un paciente oncológico en acceder a las innovaciones aprobadas por las entidades regulatorias es de 450 días en España, por detrás de países como Dinamarca (86 días), Alemania (134 días) o Austria (211 días), y esto se suma a que solo el 56 por ciento de los fármacos oncológicos llega a estar disponible en el mercado tras su aprobación, según se ha puesto de manifiesto durante IX Foro ECO.

El foro, titulado ‘Los retos de la «sostenibilidad» del SNS: horizontes de futuro’ y organizado por la Fundación ECO, ha reunido a los principales agentes involucrados en el cuidado de los pacientes con cáncer (oncólogos, farmacéuticos, gerentes, administración, industria y pacientes) para debatir, entre otros temas, sobre si el Sistema Nacional de Salud (SNS) está adaptado para poder dar una respuesta eficiente a los ciudadanos en el contexto actual.

Por su parte, el jefe del Servicio de Oncología Médica de la Fundación Instituto Valenciano de Oncología y presidente de la Fundación ECO, el doctor Vicente Guillem, ha recalcado que España es uno de los países a la cabeza de Europa en investigación, con más de 700 ensayos clínicos activos, y donde la industria ha aumentado en casi un 20 por ciento el número de fármacos en desarrollo en patologías oncológicas en los últimos 10 años. Pese a estos datos tan alentadores, España se sitúa en la cola de la inversión en Oncología con un 4,9 por ciento del gasto sanitario total, frente al 6,2 por ciento de la media europea», ha afirmado Guillem.

En este sentido, el codirector del Instituto de Salud y Estrategia (SI-Health), Rafael Bengoa, ha trasladado que, para poder afrontar el reto al que se enfrenta la sanidad española y, concretamente el ámbito de la oncología, es importante centrar los esfuerzos en aspectos concretos como el ‘screening’ poblacional o implementar en todo el país la Historia Clínica Electrónica.

«Es evidente que necesitamos un plan en el ámbito de la salud antes de la llegada de los fondos europeos, al igual que lo tienen otros sectores. Este debe contemplar un marco mucho más flexible en recursos humanos, que permita una flexibilidad gestora, y una digitalización organizada del sector», ha detallado.

Así, todos los expertos han señalado durante la sesión la importancia de la tecnología y saber cómo incorporarla correctamente en el SNS. «Debemos aprovechar la crisis que estamos viviendo para reestructurar el SNS, e incorporar herramientas como la inteligencia artificial o ‘Patient Reported Outcomes’, de la que pueden beneficiarse los pacientes y, en especial, los pacientes con cáncer» ha afirmado el director de programas científicos de la Fundación ECO y Jefe del Servicio de Oncología Médica & Laboratorio Oncología Molecular del Hospital General de Valencia, el doctor Carlos Camps.

BÚSQUEDA DE SOLUCIONES

En este sentido, la sostenibilidad del SNS no se ve afectada únicamente por el acceso a tratamientos, pues también existen otros factores que influyen directamente sobre ella, como los costes por incapacidad, que supone un 10 por ciento del total de las pensiones contributivas; los costes hospitalarios, que suponen el 58 por ciento de los costes directos; actividades comprendidas en la Cartera de Servicios del SNS; y la necesidad de inversión en personal, instalaciones y equipamientos.

En este sentido, el director de Corporate Affairs de Roche Farma, Federico Plaza, ha recalcado que es importante buscar nuevos métodos para que la financiación de fármacos innovadores sea «sostenible y reconozca la labor investigadora de las compañías».

«Tenemos que extender las capacidades de herramientas como ‘Revalmed’, así como aprender de cómo lo están haciendo otros países en materia de acceso, para ser capaces de aprovechar todo lo que la medicina personalizada puede aportar a los pacientes hoy en día. En España tenemos talento y motivación para ir en esta dirección», ha subrayado Plaza.

En esta línea, los expertos han coincidido en la importancia de la colaboración, no solo entre todos los agentes involucrados en el ámbito de salud, sino también en el ámbito público-privado, que ha demostrado su potencial durante la crisis causada por la COVID-19. «La eficiencia vinculada a la sostenibilidad se tiene que ganar con acuerdos en la manera de usar las innovaciones y en los pagos de precios, entre la Administración y las empresas productoras de innovación», ha señalado el profesor de la Escuela Andaluza de Salud Pública José Martínez Olmos.

Por su parte, el director general de Janssen, Luis Díaz Rubio, ha puntualizado que es necesario «unir el concepto de sostenibilidad» con el de reforzar el SNS», ha expresado. «Está quedando de manifiesto que tener capacidades estratégicas en el ámbito de la salud es absolutamente necesario para la resiliencia del país; es un ecosistema que debemos cuidar, ya que el coste de la ‘no salud’ es inasumible por la Sociedad», ha concluido Díaz Rubio.