El departamento de Derechos Sociales del Gobierno foral ha informado de que, este viernes, los 71 centros de mayores y 53 de discapacidad se encuentran libres de COVID-19. Esta situación no se daba desde finales del pasado mes de junio de 2020.
El Ejecutivo ha manifestado que el dato confirma el impacto positivo de la estrategia de vacunación en los centros que alcanza al 93,8% de las personas residentes, como señaló esta misma semana en rueda de prensa la consejera, Carmen Maeztu.
En el caso de los centros de mayores se han producido ya 608 altas epidemiológicas, mientras que 7 trabajadores permanecen todavía de baja. En lo que respecta a los centros de discapacidad únicamente una persona permanece hospitalizada frente a las 109 altas epidemiológicas y 3 bajas de profesionales.
La drástica bajada de la incidencia de las últimas semanas, una vez finalizado el proceso de vacunación el pasado 12 de febrero, ha permitido flexibilizar las medidas sobre visitas y salidas de los centros y recuperar las actividades interrumpidas por la pandemia, ha recordado el Ejecutivo.
Las personas que viven en centros van recuperando poco a poco la «normalidad» y comienzan a participar en actividades fuera del recinto de dichos centros, manteniendo las mismas medidas de precaución y normas establecidas para el resto de la ciudadanía.
Desde el 26 de febrero, tanto personas vacunadas como no vacunadas pueden realizar salidas del centro, incluidas las comidas y pernoctaciones en casa de familiares, sin que sea necesaria la realización de PCR o aislamiento al regreso salvo que no sea posible mantener las medidas de prevención, en cuyo caso si es necesario hacerse la prueba, ha añadido el Gobierno.
VISITAS DE FAMILIARES DE OTRAS COMUNIDADES
Por otro lado, desde esta semana se abre la posibilidad de visitas a residentes por parte de familiares que viven en otras Comunidades Autónomas para lo que cada centro expide un certificado previo.
A pesar de esta buena tendencia, tanto Salud como Derechos Sociales insisten en la importancia de no relajar las medidas preventivas para que esta situación se sostenga en el tiempo.
La consejera de Derechos Sociales, Carmen Maeztu, ha mostrado su «satisfacción» por haberse llegado a esta situación. «Hoy es el día de volver a dar las gracias a todo el personal sociosanitario, sanitario, a los responsables de los centros y a los propios residentes y sus familias por el gran esfuerzo colectivo hecho para llegar hasta aquí. Vamos a seguir vigilantes para que esta situación no se revierta, pero estamos muy esperanzados porque estamos viendo la eficacia de la vacuna de manera muy clara», ha dicho.