Preparar un mousse de requesón es muy sencillo y rápido, así que hacerlo para alguna merienda o sorprender algún invitado no te llevará mucho tiempo.
El mousse de requesón es básicamente la opción más ideal para adultos y niños, delicioso y la textura es sumamente cremosa. Lo más bueno de todo es que si sabes cómo reversar, puede conservarse de un día para otro.
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Para hacer el mousse, puedes comprar requesón en el supermercado o puedes hacerlo en casa. Su preparación no lleva mucho tiempo y puedes dejarlo hecho de un día para otro.
Para hacerlo en casa en tan sencillo como tomar un litro de leche entera y ponerlo en una olla. Le echamos el zumo de medio limón y dejamos unos minutos sin remover la mezcla. Enseguida notarás cómo la leche se ha cortado y queda por un lado el suero y por otro el requesón.
Para separar el suero del requesón coloca un paño de gasa sobre un bol y vierte la mezcla.
Deja que el suero traspase la tela y apretando un poco el paño conseguiras que salga todo el suero. Dentro quedará el requesón que es lo que utilizaremos para hacer el mousse.
Todo esto es opcional, puedes usar el que venden en el mercado sin problema.
Mousse de requesón con miel, dátiles y nueces
Hay varias opciones de mousse de requesón, pero la primera que te enseñaremos a preparar es la opción con miel, dátiles y nueces. Una combinación exquisita y suave al paladar.
Ingredientes
- 400 g de requesón
- 80 ml de nata
- 3 claras de huevo (90 g de clara pasteurizada)
- 60 g de azúcar
- 8 dátiles
- miel al gusto
- nueces picadas
- 1 pizca de sal
- 1/4 de cucharadita de cremor tártaro (opcional)
Preparación
Lo primero que debes hacer es partir los dátiles en 4 trozos, a lo largo. Déjalos hidratándose un rato en el zumo de naranja.
Luego debes mezclar la nata, el requesón y la mitad del azúcar en un recipiente. Bate todos los ingredientes hasta que el requesón se haya desecho. Si lo haces con una batidora eléctrica te quedará más suave.
En otro recipiente, coloca las claras y monta a punto de nieve. Antes de empezar a batir agrega un toque de sal y el cremor tártaro (recuerda que es opcional). Ambos ingredientes ayudarán a que las claras no se bajen.
Cuando estén a medio montar incorpora el resto del azúcar y sigue batiendo hasta obtener un merengue bien fuerte.
Luego con ayuda de una espátula, añade el merengue al requesón mediante movimientos suaves y envolventes. De esta manera la mousse no se bajará. Posteriormente dispón la espuma de requesón en las copas para servir.
Coloca los dátiles que previamente debiste escurrir y riega la mousse con un chorrito de miel al gusto y espolvorea las nueces troceadas. Guarda las copas de requesón en la nevera para que tomen más firmeza y sirve.
Mousse con toque de fresas con chocolate
Esta opción de mousse de requesón con algunos pequeños pedazos de chocolate negro y fresas es delicioso y no te llevará ni 20 minutos.
Ingredientes
- Requesón 500 g
- Nata líquida para montar 200 ml
- Esencia de vainilla 1 c/p
- Azúcar 30 g
- Chocolate negro 80 g
- Fresas 100 g
Preparacion
Para iniciar el mousse de requesón debes montar la nata. Coloca la nata para montar en un bol, añade esencia de vainilla, azúcar glass y bate hasta que esté bien montada.
A continuación, incorpora el requesón que lo tendrás que haber trabajado un poco para que se integre bien con la nata. Añade el requesón en dos tandas y lo mezclamos con molvimiento envolventes para no perder volumen.
Cuando tengamos la mousse de requesón lista vamos a hacer la virutas de chocolate negro. Con un cuchillo ve cortando el chocolate y así sacando las virutas. Mezcla las virutas de chocolate con la mousse y cuando estén bien integradas mete la mousse en una manga pastelera y guarda en la nevera.
Como punto opcional, puedes preparar un caramelo crujiente de sésamo, colocando el azúcar en un sartén a fuego medio-bajo con las semillas de sésamo.
Poco a poco notarás que el azúcar se va derritiendo y se volverá caramelo. Apaga el fuego, vierte con cuidado sobre un papel de horno formando galletitas y dejamos enfriar unos minutos.
De acompañamiento utiliza unas fresas. Limpia bien, corta y las colocas de base en el fondo del vaso. Añade la mousse de requesón y para finalizar decoramos con el caramelo, unas fresas y más virutas de chocolate.
Recuerda que puedes jugar con los ingredientes, es decir con los elementos que vayas a utilizar para darle sabor como maní, frutas, y golosinas. Puedes usar solo miel y algunos frutos secos o solo añadirle algunas frutas como fresas, arándanos y otros. Solo debes tener una buena nata, un buen requesón y listo.