El expresidente del Gobierno José María Aznar ha defendido este martes el Pacto de Majestic que firmaron el PP y CiU en 1996 y ha subrayado que fue un acuerdo «para toda España» que llevaría poco después al PP a lograr su «máximo histórico de votos» en Cataluña. Tras recalcar que «las cosas han cambiado» en esta comunidad «pero no por ese pacto», ha asegurado que le gustaría que «hoy se pudieran producir espacios de entendimiento, diálogo y acuerdo en la política española».
Aznar ha realizado esa reflexión delante del actual líder del PP, Pablo Casado en un acto con motivo del 25 aniversario de la victoria del partido en las generales de 1996 y se produce apenas dos semanas después de que el partido haya sufrido un batacazo electoral en las catalanas, al lograr solo tres diputados –el peor resultado de su historia– y sufrir el ‘sorpasso’ de Vox.
Esta jornada, bajo el título ‘España, Constitución y libertad. 1996-2004, un análisis’, ha sido organizada por el Instituto Atlántico de Gobierno y la Universidad Francisco de Vitoria. Ha contado también con la participación de Casado, el vicepresidente de FAES y exdiputado del PP, Manuel Pizarro; la economista y notaria, Isabel Estapé, y el historiador Manuel Álvarez Tardío. Además, ha asistido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
RECHAZA QUE EN ESE PACTO HUBIERA «CESIONES» AL NACIONALISMO
Tras explicar que este acto no era para «celebrar nada», Aznar ha repasado su gestión en economía o lucha contra el terrorismo y ha recalcado que durante años trabajaron por «unir todo lo que estaba a la izquierda, hacer tarea de oposición y definir un proyecto muy claro que los españoles conocían y supieron apreciar.
En el coloquio posterior, ha hecho hincapié en el Pacto de Majestic subrayando que no fue un pacto para una región sino «para toda España». De hecho, ha rechazado de plano que hubiera «cesiones» a los nacionalistas.
Según ha dicho, ese pacto implicó acordar las reformas económicas de España, el camino hacia el euro, medidas fiscales, ocuparse del empleo y llegar al euro, así como «un nuevo sistema de financiación autonómica para todas las comunidades de España». Es más, ha señalado que ese pacto de financiación «a las que más benefició fue a Andalucía y a Extremadura».
Aznar ha relatado que solo había dos cosas «específicas» para Cataluña en el Pacto de Majestic, una relativa a la transferencia de políticas activas de empleo y otra sobre la posible transmisión de la Policía de Tráfico, cuya ley orgánica contó con 300 votos a favor de los 301 «diputados presentes» en el Congreso.
«MÁXIMO HISTÓRICO DE VOTOS EN CATALUÑA»
El expresidente ha indicado que cuatro años después de ese pacto, el PP logró en 2000 su «máximo histórico de votos en Cataluña, con 784.000 votos». Ese año, ha proseguido, el PP consiguió «una mayoría absoluta primera y espectacular en España».
«Si eso es así, no es comprensible que el Pacto del Majestic sea una historia de cesiones si uno se lee ese pacto y resulta que te dan la mayoría absoluta. Te dan la mayoría absoluta porque había más España, más nación, más país, más progreso, más empleo, más crecimiento del PIB y más presencia en el mundo», ha enfatizado.
Además, Aznar ha compartido los argumentos del profesor Tardío y ha asegurado que entonces el PP se había «convertido en un foco de atracción que impedía el crecimiento de todo lo demás». «Es curioso que después de ese pacto, el nacionalismo pierde la mayoría absoluta y el PP la gana», ha apostillado.
«HOY ESTREMECE VER EL COLAPSO DE CATALUÑA»
Delante de Casado, el expresidente del Gobierno ha afirmado que defiende ese pacto porque a él le gustaría que «hoy se pudieran producir en la política española espacios de entendimiento, de diálogo y acuerdo que pudiesen dar lugar a pactos relevantes e importantes».
«Las cosas han cambiado, pero no por ese pacto», ha proclamado Azanr, que ha avisado que «cuando alguien rompe los pactos constitucionales, la responsabilidad es de quién los rompe». Además, ha indicado que los nacionalistas catalanes de entonces «fueron bien advertidos que si no se implicaban más en la colaboración con España entrarían en una dinámica de radicalismo» como la de ahora.
Aznar ha subrayado que «hoy lo que estremece ver es el colapso político, económico, social y cultural de Cataluña» y ha resaltado que no se puede «vincular esto» con aquel Pacto de Majestic porque «no tiene nada que ver».
ALUSIÓN A RAJOY TRAS EL NACIMIENTO DE Cs y VOX
A su entender, lo que ha pasado ahora en Cataluña es «responsabilidad de otros» y «algunas otras políticas que se dejaron de hacer en su momento», en alusión velada a la gestión de Mariano Rajoy en Cataluña. «No hay que olvidar que una parte del fraccionamiento que se produce en la política española viene de allí», ha resaltado.
Así, ha destacado que Ciudadanos es un partido «que nace» en Cataluña y ha añadido que Vox «en gran medida es un partido que nace allí» también «como consecuencia de determinadas circunstancias y situaciones que se producen en la política española».
CONVERTIRSE EN POLO DE ATRACCIÓN PARA QUE NO CREZCAN LOS EXTREMOS
Aznar ha recomendado analizar la serie histórica del CIS, ahora que se viven «momentos de agobio para la unidad nacional y la continuidad histórica de España». Esa encuesta, según ha proseguido, recoge que «los dos momentos más bajos del sentimiento nacionalista en España» en Cataluña fueron en 1999 y 2003.
«Eso quiere decir que la consolidación de la alternativa, la expresión de unas políticas y covertirte en un polo de atracción para evitar que los extremos crezcan, me parece una cuestión esencial y una de las lecciones más importantes que se puede extraer para hoy», ha afirmado.
Tras recordar que el CDS de Adolfo Suárez «estuvo a punto de sorpassar a la Alianza Popular de Fraga», ha insistido en que ser el «polo de atracción es absolutamente fundamental» porque España «necesita hacer muchas cosas para fortalecer la nación, el Estado, estabilizar la economía, relanzarla y tener más proyección internacional.
La economista Isabel Estapé ha señalado después que el expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol, se dedicó muchos años a ir «fardar de haber conseguido todo lo que quería» y lograr que «cayese Alejo Vidal Quadras», el entonces presidente del PP en Cataluña.
AZNAR PIDE A CASADO DAR LA BATALLA DE LAS IDEAS
En la parte final del acto, Aznar ha advertido a Casado de que «la batalla de las ideas es básica, fundamental y esencial» y ha señalado que los actuales gobernantes son capaces de «hacer cualquier cosa con tal de seguir». «Y eso es exactamente lo que no hay que hacer», ha concluido.
Al ser preguntado expresamente si quería darle algún consejo a Casado, Aznar ha dicho que le deseaba «muchísima suerte» porque «España la necesita y el centroderecha también». En su opinión, cuando se dirige un partido como el PP hay que «marcar el camino, definir la estrategia y tomar las decisiones», algo que «le corresponde a él».
De la misma manera, el exdiputado Manuel Pizarro le ha deseado «lo mejor» a Casado y se ha mostrado convencido de que llegará al Palacio de la Moncloa. «Para llegar a la tierra prometida hay que pasar por mucho desierto», ha concluido.