La vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha afirmado este jueves que el Gobierno analizará con «mucho cuidado, detenimiento y detalle» la OPA del fondo australiano IFM sobre el 22,69% de Naturgy, al tratarse de una compañía de un sector «estratégico» con operaciones e infraestructuras «críticas» para España, si bien ve un «signo positivo de confianza» el interés inversor.
Además, considera que el Gobierno hizo «bien» en poner en marcha la reforma normativa con instrumentos para asegurar un análisis «profundo y detallado» de las operaciones de toma de participación significativa (a partir del 10% del capital) en empresas españolas.
Así lo ha señalado durante su intervención en un encuentro informativo online organizado por Nueva Economía Fórum (NEF) al ser preguntada sobre el anuncio de IFM Global Infrastructure Fund de una oferta pública voluntaria y parcial de adquisición (OPA) de hasta 220 millones de acciones de Naturgy Energy Group, que representan el 22,69% del capital social de la compañía, por un importe de 5.060 millones de euros, a razón de 23 euros por título.
Calviño cree que es «prematuro» pronunciarse respecto a la operación porque «no se ha iniciado el procedimiento y no se ha producido la notificación por parte del fondo y el análisis en profundidad» de la misma por parte del Gobierno, entre otros organismos, si bien ha valorado que, «en general», el hecho de que los inversores extranjeros muestren interés sobre empresas españolas es un «signo positivo de confianza».
En este sentido, ha destacado que ese interés refleja la confianza en que España es un país con «buenas perspectivas económicas» y una previsión «interesante» de crecimiento a medio plazo y con «buenas empresas».
No obstante, ha dicho que esto no debe obviar el hecho de que hay que analizar «en profundidad y en mucho detalle» la operación, al tratarse de un operador en un sector estratégico como el energético, con operaciones e infraestructuras «críticas» para España.
Además, ha enfatizado, tiene lugar en un momento «particularmente estratégico» en el que se aborda la transformación del sector energético del país puesto en marcha hace más de dos años y liderado por la vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera, que «está empezando a dar sus frutos», como por ejemplo la «positiva» subasta de energía renovable de esta semana.
«Es evidente que tenemos que examinar esta operación con mucho cuidado, detenimiento y detalle», ha insistido Calviño, quien ha resaltado que el Gobierno hizo «bien» en poner en marcha la reforma normativa al inicio de la pandemia para establecer instrumentos que permitan poder asegurar que «cualquier operación de toma de participación significativa de una empresa española de sectores estratégicos va a contar con un procedimiento para tener un análisis profundo y detallado».
Esto «evitará que podamos tener problemas desde el punto de vista de nuestros intereses estratégicos de cara al futuro», ha remarcado.