Obispos señalan la «responsabilidad moral» de Israel para que las vacunas sean accesibles

Obispos de diferentes países del mundo, entre ellos el español Joan Enric Vives Sicilia, arzobispo de Urgell, –en nombre de la Conferencia Episcopal Española– han pedido a la comunidad internacional que urja a Israel a que las vacunas contra la Covid-19 sean accesibles para los palestinos que viven en Cisjordania y Gaza, porque consideran que es una «responsabilidad moral y legal».

«La comunidad internacional debe urgir a Israel sobre la responsabilidad que tiene, moral, legal y humanitaria, de hacer que las vacunas contra el Covid-19 sean accesibles para los palestinos en Cisjordania y Gaza, prestando atención al mensaje del Papa Francisco de que ‘ante un desafío que no conoce fronteras, no podemos levantar muros'», subrayan los prelados en un comunicado.

Así lo reclaman en el mensaje final de la reunión de la Coordinadora de los obispos de Tierra Santa, que ha tenido lugar como cada año por estas fechas aunque, en esta ocasión, por primera vez, los obispos no han podido encontrarse en Tierra Santa debido a la pandemia.

En todo caso, aunque el encuentro se ha celebrado de forma virtual, los prelados han escuchado testimonios de cristianos de Cisjordania, Gaza e Israel y han concluido que queda «dolorosamente claro que hoy se dan menos motivos para la esperanza que en cualquier otro momento de la historia reciente».

En primer lugar, los prelados advierten de que los desafíos para la salud del Covid-19 «se ven agravados» en la zona «por el conflicto, la ocupación y el bloqueo. Además, ponen de manifiesto que «la ausencia de peregrinos ha agravado las dificultades económicas generalizadas, ha incrementado el desempleo y ha empujado a muchas más familias a la pobreza».

Por otro lado, señalan que «la falta de progreso político, junto con la implacable expansión de los asentamientos ilegales y el impacto de las leyes del Estado-Nación de Israel continúan erosionando cualquier esperanza de una solución pacífica con dos estados».

En este contexto, hacen un llamamiento a «fortalecer la solidaridad» con las personas que viven en Tierra Santa y piden «a los dirigentes israelíes y palestinos que se comprometan nuevamente con las negociaciones directas».

Igualmente, instan a los demás gobiernos a «renovar su participación activa en la búsqueda de una paz justa, apoyando las negociaciones directas entre todas las partes, defendiendo el derecho internacional y reafirmando la pluralidad de Jerusalén, dada su importancia única para judíos, cristianos y musulmanes.

También destacan la importancia «vital» de las escuelas católicas, las clínicas, los hospitales y otros proyectos sociales, incluido el trabajo de Cáritas, aunque afirman que «se encuentran bajo una fuerte presión».

Finalmente, los obispos dicen esperar «con impaciencia el momento en que los cristianos de todo el mundo puedan volver a realizar peregrinaciones a Tierra Santa».

Para llegar a estas conclusiones, los prelados han asistido a diversos diálogos con el responsable del Patriarcado latino de Jerusalén, Sami el-Youseff, con el patriarca latino de Jerusalén, Pierbattista Pizzaballa, el nuncio apostólico en Israel y Chipre y delegado apostólico para Jerusalén y Palestina, Leopoldo Girelli, con la comunidad cristiana en Gaza, y con jóvenes israelíes y palestinos.