Microsoft celebrará en noviembre los 20 años del lanzamiento en Estados Unidos de su primera videoconsola, Xbox, un proyecto en el que pocas empresas del sector creyeron en sus inicios pero ha terminado por convertirse en uno de los actores más importantes del mismo, pese a que Nintendo llegara a reírse de la compañía estadounidense cuando intentó adquirir su negocio.
La primera vez que se escuchó el nombre de Xbox fue en Games Developers Conference 2000, un año después de que se tuvieran las primeras noticias sobre Playstation 2, con la que Sony tenía la intención de rediseñar el mundo del ordenador y de caminar hacia un hogar sin ordenador.
Esta declaración de intenciones alertó a Microsoft, que lo entendió como un ataque ante del que no podía quedar impasivo. Empezaron entonces multitud de reuniones sobre si la compañía debía dar el salto al área de los juegos y la forma en que afrontar este camino, como han contado varios directivos de Xbox en una entrevista a Bloomberg.
En la idea trabajaban varios grupos de forma simultanea pero separada. Uno de ellos eran los responsables de DirectX, una solución pionera en el campo de los videojuegos para ordenador, que permitió a los desarrolladores de la época trabajar en experiencias que DOS no les permitía crear, con el incentivo adicional de hacerlo directamente para Windows.
Inicialmente denominada en la empresa como Windows Entertainment Platform, con el nombre en clave de Midway, acabó siendo DirectX Box, Xbox en su forma abreviada, ya que fue esta solución la que encaminó el desarrollo de este equipo, como un ordenador que pretendía ser una videoconsola.
Así, en Games Developer Conference de 2000 se anunció Xbox, y un año más tarde, se presento el sistema de videojuego Xbox en Los Ángeles. Llegaría al mercado en Estados Unidos en noviembre de 2001 (a Japón y Europa lo haría en 2002).
No obstante, y ya con el hardware listo, faltaban los juegos, sobre todo, títulos con calado entre el público. En la búsqueda de este software los directivos de Microsoft llegaron a entrevistarse con EA, Bethesda, Tecmo, Square Enix o Konami.
También se reunieron con Nintendo, a quienes propusieron una asociación joint venture o si considerarían una adquisición, ya que entonces su hardware no era el mejor, pero despuntaban con los juegos. Como respuesta, los directivos de la compañía japonesa se rieron, aseguran los entrevistados.
Pese a los obstáculos iniciales, el negocio de los videojuegos de Microsoft alcanzó los 11.600 millones de dólares -datos a cierre de su año que finalizó el pasado 30 de junio-. El pasado 10 de noviembre salió a la venta su consola de nueva generación, Xbox Series S/X, con el respaldo de títulos como Assassin’s Creed Valhalla o Watch Dogs Legion.