Azpilicueta acerca su futuro al Celta y se despide del Atlético
César Azpilicueta ya ha tomado una decisión importante sobre su carrera. El defensor navarro, que termina contrato con el Atlético de Madrid, le comunicó oficialmente al club que no continuará la próxima temporada. Aunque todo apuntaba a un posible regreso a Osasuna, su historia ha dado un giro inesperado. Y es que el Celta de Vigo ha irrumpido como un candidato muy serio para hacerse con sus servicios.
La propuesta del conjunto celeste ha captado de lleno la atención del experimentado zaguero, quien busca un destino donde recuperar el protagonismo perdido en el esquema de Diego Simeone. Con la carta de libertad bajo el brazo, Azpilicueta analiza una propuesta que no solo le ofrece minutos importantes en LaLiga, sino también un proyecto deportivo que apuesta fuerte por su jerarquía y experiencia.
Giráldez quiere a Azpilicueta como pieza clave de su esquema
Claudio Giráldez, actual entrenador del Celta, tiene muy claro el rol que le ofrecería a César Azpilicueta y es ser uno de los pilares de su defensa. Durante esta temporada, Giráldez ha mostrado versatilidad en sus planteamientos, alternando esquemas más ofensivos y defensivos según las necesidades de cada partido. En ataque suele apostar por un 3-4-3, mientras que en defensa no duda en reforzarse con una línea de cinco, un sistema en el que el navarro encajaría de manera perfecta como central.
Esta posibilidad de asumir un rol de liderazgo resulta especialmente atractiva para Azpilicueta, quien en el Atlético había ido perdiendo peso en el vestuario. Bajo las órdenes de Giráldez, tendría no solo la titularidad asegurada, sino también un equipo que valora su experiencia y su polivalencia como piezas fundamentales para construir un proyecto ambicioso. Un equipo que mezcla el entusiasmo de los jóvenes talentos con la estabilidad de figuras consagradas.
El alto salario de Azpilicueta, un obstáculo a superar
Sin embargo, no todo es tan sencillo. El principal obstáculo para cerrar la llegada de Azpilicueta al Celta es, sin duda, su alto salario. Actualmente, el defensor percibe cerca de 8 millones de euros por temporada en el Atlético, una cifra fuera del alcance de las posibilidades económicas del conjunto gallego. Para ponerlo en contexto, Marcos Alonso, el mejor pagado del Celta, gana aproximadamente 3 millones de euros al año.
Para que el fichaje se haga realidad, Azpilicueta tendría que aceptar una importante rebaja salarial. La idea sería situarlo en torno a los 3,5 millones por temporada, con un contrato inicial de un año y la opción de extenderlo un curso más. Pese a las diferencias económicas, en el Celta siguen soñando con su llegada, convencidos de que el proyecto deportivo y la posibilidad de disputar competiciones europeas a corto plazo pueden terminar de seducirlo.