A sus 38 años y retirado desde noviembre de 2024, Rafa Nadal sigue recibiendo premios. El último de ellos, el lunes 21 de abril, cuando le fue otorgado el premio Laureus a Icono Deportivo tras una carrera deportiva que acumula veintidós títulos del Grand Slam, un oro olímpico individual en Pekín 2008, otro en dobles en Río de Janeiro 2016, cinco Copas Davis, dos Copas Laver o el Premio Príncipe de Asturias en 2008, entre otros.
Durante la rueda de prensa del evento, Rafa Nadal comentó que su retirada del tenis fue meditada: «Necesitaba tiempo para saber que la decisión que tomaba era la adecuada, habría tolerado mal si pensase que en vez de estar en el sofá debería estar jugando. Cuando vi que mi cuerpo no se iba a recuperar al nivel que necesitaba para disfrutar de la manera que necesitaba, decidí parar. Terminé con la tranquilidad de que di todo lo que tenía dentro», dijo. Y ahora, en una entrevista con MARCA, aclaró como se encuentra.
Rafa Nadal no piensa en el tenis tras meses retirado
Es ahí donde le preguntó cómo sigue su vida después de colgar la raqueta. A lo que Rafa Nadal comentó. «Pocas veces, pero bueno, alguna vez, evidentemente sueñas y te despiertas pensando que vas a jugar un partido. Pero no, la verdad que no, es una etapa que la tengo bien cerrada en mi vida«.
Es más; Rafa Nadal dejó claro que su vida con la raqueta está cerrada. «Totalmente aceptada y sin ningún tipo de nostalgia. Me retiré en el momento adecuado porque me retiré cuando estuve convencido que había dado todo lo que tenía que dar. Ahora tiene una relación diferente con el tenis, porque solo ve los partidos que le interesan.
La raqueta la he cogido para jugar con mi hijo y poco más
De hecho, al ser preguntado sobre siguientes pasos en el deporte de la raqueta, como puede ser el dirigir un torneo como el Conde de Godó o el Mutua Madrid Open o ser capitán de la Davis, al estilo de lo que hacen David Ferrer o Feliciano López, Rafa puso tierra de por medio. «Hace poco terminé un camino que ha sido largo y tengo que prepararme para lo que viene.
«La raqueta la he cogido para jugar con mi hijo y poco más. En algún momento que estoy con la academia, con los chicos, si tengo que hablar algo con ellos, pero por ahora lo que es jugar…», dejaba el campeón de 22 Grand Slams. Además, en el caso de reencontrarse con su yo no de niño, cree que no le diría «mucho» porque en su vida «no le ha ido mal». Las palabras tienen un poder X, pero lo que tiene más poder son los ejemplos, que no necesariamente deben ser excepcionales porque puede haber gente de alrededor que te inspire cada día», reflexionó.