El Gran Premio de Arabia Saudí no solo dejó cifras en los tiempos de clasificación, sino también una de las declaraciones más crudas y sinceras que ha dado Fernando Alonso desde su regreso a la Fórmula 1.
El piloto asturiano, dos veces campeón del mundo, no se guardó nada al analizar la situación de Aston Martin. “Somos quizás el último equipo”, soltó sin rodeos tras quedar en la posición número 13 en la clasificación de Jeddah, una actuación que, más que aliviar, expone el delicado momento que atraviesa la escudería británica.
2Aston Martin, en la parte baja de la tabla

La dureza en el discurso de Fernando Alonso no se justifica solo por el resultado del día. Va mucho más allá. Para él, lo que vive Aston Martin no es un simple bajón, es una crisis estructural.
“Tenemos que poner tres juegos de neumáticos en la Q1 para intentar pasar a Q2 y, si pasamos de milagro, luego solo tenemos gomas usadas”, explicó, visiblemente molesto.
El mensaje es claro y es que el coche no rinde ni ofrece margen estratégico, y eso condiciona desde el primer minuto cada intento de clasificación.