Courtois habla claro tras la caída ante el Arsenal
La eliminación del Real Madrid en los cuartos de final de la Champions League a manos del Arsenal ha dejado más que una simple decepción deportiva. Tras el pitazo final, fue Thibaut Courtois quien se robó los titulares. No por una atajada salvadora ni por su desempeño bajo los tres palos, sino por una frase que rápidamente se viralizó en redes. «Metimos muchos centros, pero este año no tenemos un Joselu, un delantero nato.»
Más allá de la aparente sencillez de sus palabras, el portero belga dejó entrever una crítica que tocó fibras sensibles dentro del madridismo. El mensaje caló hondo, no tanto por lo que dijo, sino por lo que insinuó. Una falta de planificación ofensiva, una carencia táctica evidente y una señal de que el equipo blanco, aun con su constelación de estrellas, se quedó sin respuestas en los momentos clave.
El Santiago Bernabéu, escenario habitual de gestas europeas, esta vez no fue testigo de la épica. Courtois, siempre directo, reconoció la superioridad del Arsenal. Pero también lanzó una bomba mediática que ha sido interpretada por muchos como una excusa inesperada. Culpar la falta de un «9» clásico en un equipo plagado de talento generó desconcierto y abrió un debate que promete extenderse más allá de esta eliminación.
La figura que no estuvo
Lo que dijo Courtois no pasó desapercibido, y mucho menos se lo llevó el viento. El arquero del Real Madrid, con la frontalidad que lo caracteriza, no esquivó los micrófonos. Pero esta vez, sus palabras sorprendieron incluso a sus más fieles defensores. Apuntar a la ausencia de un perfil como el de Joselu —jugador que ha tenido un rol marginal esta temporada— como explicación de una eliminación europea resultó, para muchos, difícil de digerir. «Metimos muchos centros, pero no tenemos un Joselu para ganar esos duelos aéreos», repitió, dejando en claro que su crítica iba más allá de una simple observación táctica.
En su análisis post partido, Courtois fue contundente y es que reconoció que el Arsenal jugó con inteligencia, defendiendo en bloque, presionando alto y neutralizando los intentos blancos por las bandas. La apuesta constante del Real Madrid por los centros laterales no surtió efecto, y la solidez de los londinenses terminó imponiéndose sin que el conjunto merengue lograra inquietar realmente a su arquero rival. «No creo que Raya haya tenido que hacer ni un paradón», confesó el belga, evidenciando la falta de ocasiones claras y la impotencia ofensiva de un equipo que, en otros tiempos, no necesitaba de un «nueve puro» para marcar diferencias.
Autocrítica sin anestesia y un equipo sin conexión
Lejos de escudarse únicamente en la figura de Joselu, Courtois también mostró un lado autocrítico que no siempre se ve en conferencias post derrota. El arquero fue más allá del resultado y se animó a señalar uno de los problemas estructurales que arrastra el equipo, la falta de conexión y juego colectivo. «A veces hay que hacer autocrítica y mirar todo bien. Siento que somos un equipo, pero tenemos que hacer más jugadas colectivas y no todo individuales», reflexionó.
Este tipo de declaraciones no son habituales en Courtois, un jugador que normalmente cuida sus palabras. Por eso, lo dicho en Londres no fue interpretado como una simple descarga emocional, sino como un llamado de atención con destinatarios claros. El guardameta dejó al descubierto una de las grandes falencias del Real Madrid en esta edición de Champions League. Un equipo con individualidades brillantes, pero con pocos engranajes reales cuando el rival exige funcionamiento colectivo. Y en una competencia como esta, eso se paga caro.