En el mundo del jamón ibérico, no todo es igual. Hay diferencias significativas entre productos que comparten nombre pero no calidad, proceso ni origen. La marca Alba Romero es bien conocida por su jamón ibérico de bellota y ha logrado prestigio por su enfoque tradicional y transparente. Esta marca andaluza apuesta por un modelo que combina campo y tradición y ofrece jamón ibérico a domicilio. El resultado es un jamón de la mejor calidad que llega a los hogares sin perder ni un ápice de autenticidad.
¿Qué significa realmente “ibérico de bellota”?
El término “ibérico de bellota” significa que proviene de cerdos ibéricos criados en libertad y que han consumido una mezcla de bellotas y pastos naturales durante la época de montanera desde octubre hasta marzo. Solo los jamones ibéricos que han seguido este ciclo natural, y que han vivido en la dehesa, pueden llevar con orgullo la denominación de “bellota”.
Así, la alimentación del cerdo tiene un impacto directo en la carne, resultando en una mejor sabor y textura con grasa infiltrada. Las bellotas poseen ácido oleico, que le otorga a la carne sus propiedades saludables y aceitosas. Además, el ejercicio de los cerdos mientras se mueven por el campo contribuye a un producto final más complejo.
Alba Romero: raíces, profesionalidad y control
Alba Romero es una empresa familiar ubicada en la comarca de Jabugo (Huelva). No es un gran distribuidor ni un grupo industrial, sino una compañía que trabaja directamente con ganaderos locales y supervisa cada paso del proceso, desde el campo hasta el curado y la venta final.
Jabugo es una de las cuatro únicas regiones en España con Denominación de Origen Protegida (DOP) para el jamón de bellota 100% ibérico. La región cuenta con una de las dehesas más grandes y mejor conservadas de España. Allí, los animales se crían en semi-libertad y pueden recorrer grandes áreas donde se alimentan de forma natural. Este modelo de producción garantiza la trazabilidad, el control sanitario y un conocimiento íntimo del producto.
Un proceso que lleva su tiempo
Después de la montanera, se sacrifican los cerdos y comienza el proceso de curación, que puede durar entre 36 y 48 meses, o incluso más.
Cada jamón pasa por sal, secado natural y maduración en bodegas naturales, donde la humedad y la temperatura se ajustan utilizando técnicas artesanales.
Durante este tiempo, el jamón desarrolla un sabor único. Este complejo y largo proceso no se puede acelerar, y no hay atajos y con él se consigue el mejor producto para comprar jamón ibérico online.
Venta directa: del secadero a la mesa
Uno de los puntos fuertes de Alba Romero es que vende directamente al usuario, sin distribuidores ni intermediarios, a través de su página web oficial. Su modelo presenta claras ventajas:
- Frescura: el producto no permanece meses en almacenes.
- Transparencia en el curado: el origen, proceso de curado y naturaleza del producto son cristalinos.
- Precio inmejorable: sin intermediarios, el precio se ajusta al valor real.
- Servicio directo al cliente: resolver consultas relacionadas con el producto con los expertos es increíblemente fácil, ya que todas las respuestas provendrán del propio equipo que ha curado el jamón.
Este modelo ha ganado popularidad rápidamente y es el preferido por quienes buscan el origen y la autenticidad en el Jamón Ibérico de Bellota, no solo el producto final.
Sabor con conciencia ecológica
Consumir jamón ibérico de bellota no es un capricho, también es una forma de apoyar un modo de producción más ecológico. La cría extensiva de cerdo ibérico en dehesa ayuda a conservar un ecosistema único, donde existe equilibrio entre ganadería y bosque mediterráneo.
La dehesa es un hábitat biodiverso que se mantiene gracias al pastoreo controlado. En este sentido, comprar jamón ibérico de bellota de una empresa pequeña, responsable y con trazabilidad completa es no solo una decisión gastronómica, sino también ética.
Cómo saber si estás comprando calidad
Hay cierta confusión en el mercado. Muchos jamones afirman ser “ibéricos” cuando en realidad no son alimentados con bellota o 100% ibéricos. En un jamón de calidad hay que tener en cuenta varios aspectos.
El primero de ellos es la etiqueta negra, indicativa de un jamón de bellota 100% ibérico (la categoría más alta). Además, debe contar con origen certificado, de Los Pedroches, Jabugo, o Guijuelo con DOP. Su curación mínima debe ser de 36 meses, con venta directa o en tiendas especializadas y ha de disponer de documentación clara del producto: trazabilidad, ficha técnica y número de lote.
En el caso de Alba Romero, toda esta información es accesible en el punto de compra.
No es solo un lujo, es una cultura
España tiene productos emblemáticos: aceite, vino, queso… Pero pocos son reconocidos internacionalmente como el jamón ibérico. No es simplemente comida, sino una representación de la identidad, el paisaje, y un estilo de vida que merece seguir existiendo.
Alba Romero mantiene esa visión. No vende jamón como un objeto lujoso, sino un producto con historia que comienza en el campo, es elaborado por artesanos, y finalmente llega a la mesa de aquellos que lo aprecian.