Carlos Alcaraz firmó una victoria contundente en las semifinales del Masters 1000 de Montecarlo al derrotar a su compatriota Alejandro Davidovich Fokina por 7-6(2) y 6-4.
El murciano, que sigue en plena recuperación hacia su mejor versión, dio un paso firme hacia la final del Principado, manteniendo viva su persecución por el trono del tenis mundial, que en este momento ocupa Jannik Sinner.
3El físico no alcanza para frenar al talento
En el segundo set, Davidovich solicitó la intervención del fisioterapeuta debido a molestias en su hombro derecho. A pesar de su esfuerzo, el malagueño no logró frenar la ofensiva de Carlos Alcaraz, quien mantuvo la ventaja de un quiebre hasta el final.
El murciano aprovechó tres de las 19 oportunidades de break que generó, un número bajo, pero suficiente para sellar la victoria. «No le dejé entrar y que remontara«, analizó Alcaraz tras el partido.