El Real Valladolid ha tomado cartas en el asunto tras el lamentable episodio protagonizado por Luis Pérez en el último partido del equipo. El lateral derecho intentó agredir a su compañero Juanmi Latasa mientras ambos se encontraban en el banquillo, un gesto que no ha pasado desapercibido en el seno del club blanquivioleta. La entidad presidida por Ronaldo Nazário ha considerado este comportamiento como inaceptable y ha abierto un expediente disciplinario al futbolista andaluz, una medida que podría desembocar en más sanciones internas según avancen las investigaciones y se analicen todos los detalles del incidente.
Como primera consecuencia, el Real Valladolid ha decidido retirar a Luis Pérez de sus funciones como tercer capitán del equipo. Esta decisión, aunque simbólica en parte, refleja la firme intención del club de no tolerar actitudes que atenten contra la convivencia y el respeto dentro del vestuario. El mensaje es claro, el comportamiento profesional y el compañerismo están por encima de cualquier rol jerárquico dentro del equipo. Aun así, el futbolista sigue entrenándose con normalidad junto al resto del grupo, al igual que Latasa, lo que indica que, de momento, el club no contempla una exclusión total del jugador mientras se resuelve el expediente.
Un incidente que evidencia la crisis
El gesto de Luis Pérez ha sorprendido no solo a los aficionados, sino también a gran parte del cuerpo técnico y a sus propios compañeros, con quienes hasta ahora mantenía una imagen de profesionalidad y compromiso. Las imágenes del altercado han generado un amplio debate en redes sociales, donde se ha criticado duramente al jugador por su actitud impulsiva. El motivo del enfrentamiento no ha trascendido de forma oficial, pero las imágenes de televisión muestran una discusión que se fue de las manos, derivando en el intento de agresión que las cámaras captaron.
Desde dentro del vestuario, se ha intentado enfriar la situación dejando ver que Juanmi Latasa y Luis Pérez en realidad son compañeros al tiempo que han destacado la importancia de cerrar filas y no dejar que el incidente afecte al rendimiento colectivo. El propio club ha subrayado en un comunicado que el respeto y la unión son pilares fundamentales del proyecto, y que cualquier desviación será tratada con la seriedad que merece. Se espera que, tras la resolución del expediente, tanto Pérez como Latasa puedan pasar página y centrarse en lo deportivo.
Luis Pérez se juega algo más que su brazalete
La pérdida del brazalete de capitán no es el único riesgo que corre Luis Pérez. En función de cómo se resuelva el expediente disciplinario, el lateral podría enfrentarse a sanciones económicas e incluso deportivas que pongan en entredicho su continuidad en el club. Aunque por ahora sigue formando parte del grupo, desde la dirección deportiva no se descarta que se tomen medidas más drásticas si el comportamiento se repite o si se considera que el incidente ha afectado de forma negativa al grupo.
El futuro inmediato de Luis Pérez en el Real Valladolid dependerá en buena parte de su actitud en las próximas semanas. El jugador tendrá la oportunidad de pedir disculpas públicamente, limar asperezas con Latasa y demostrar que su compromiso con el equipo sigue intacto. La temporada entra en un tramo decisivo y el club necesita unidad para afrontar sus objetivos deportivos, que pasan por pelear la salvación en las últimas jornadas.