El litigio económico de Mbappé sacude al fútbol francés
La disputa económica entre Mbappé y el PSG se intensificó cuando el jugador decidió abandonar los canales administrativos y avanzar por la vía judicial. Según su equipo legal, el club le debe tres meses de salario y una parte de la prima por renovación, una suma que considera legítima. En el corazón del conflicto está un supuesto acuerdo verbal. El PSG lo defiende como válido, pero los abogados de Mbappé aseguran que nunca fue registrado oficialmente, por lo que carece de respaldo legal.
Al frente de la ofensiva legal está Delphine Verheyden, quien ha llevado el caso más allá de lo laboral, abriendo también frentes civiles y penales. Una de las acciones más contundentes fue el embargo cautelar de 55 millones de euros a las cuentas del club, ya aprobado por un tribunal. Además, se han presentado denuncias por injurias contra quienes atacaron públicamente a Mbappé y a su familia. Según su entorno, esto forma parte de una campaña para deteriorar su imagen ante la opinión pública.
Defensa agresiva por parte del entorno de Mbappé
“Ya hemos esperado demasiado”, dijo Verheyden en una conferencia cargada de tensión. Acompañada por su equipo legal, explicó que se acabó la paciencia y que es hora de actuar. Una de las estrategias fue acudir a la Federación Francesa de Fútbol para que informe a la UEFA sobre el incumplimiento contractual. Esto podría derivar en una expulsión del PSG de las competiciones europeas. El entorno de Mbappé también acusa al club de haberlo apartado del grupo como represalia tras negarse a renovar en 2023.
Los abogados lo consideran una actitud “escandalosa” y una forma de castigo que no tiene justificación legal ni ética. Como si fuera poco, el reclamo también incluye un argumento fiscal. Y es que al no pagar los 55 millones, el PSG estaría privando al Estado francés de unos 75 millones en impuestos. Un punto que el equipo del jugador ha usado para sumar presión mediática y política al caso.
La respuesta del PSG
Desde el club, la reacción fue inmediata. El PSG considera “fantasioso” todo lo que han planteado los abogados de Mbappé. Aseguran que el único tribunal competente para resolver el conflicto es el laboral, y que han ofrecido soluciones amistosas que fueron rechazadas por el jugador. Para el PSG, Mbappé recibió condiciones excepcionales durante su etapa en París y ahora actúa de mala fe.
En un comunicado oficial, anunciaron que defenderán la validez del acuerdo verbal con testimonios y documentos que probarían su existencia. Mientras tanto, el club intenta mantener el foco en lo deportivo, aunque el ruido alrededor del caso es ensordecedor. Lo que ocurre con Mbappé y el PSG podría marcar un antes y un después en las relaciones contractuales entre futbolistas y equipos. Y más allá del fútbol, también podría dejar huella en el derecho deportivo europeo.