El técnico del Arsenal, Mikel Arteta, desveló tras la contundente victoria por 3-0 frente al Real Madrid en el Emirates Stadium un detalle que pocos esperaban. En la rueda de prensa posterior al encuentro de ida de los cuartos de final de la Champions League, el entrenador español confesó que había mantenido una conversación previa al partido con Pep Guardiola, técnico del Manchester City. «Con Pep hablamos hace unos días y quería pedirle un consejo. Es importante aprender del mejor», reconoció Arteta con humildad y admiración hacia su antiguo mentor.
La revelación no ha pasado desapercibida. La estrecha relación entre Arteta y Guardiola, que trabajaron codo con codo durante varias temporadas en el City, parece haberse convertido en una fuente de sabiduría táctica para el joven entrenador del Arsenal. En este caso, el consejo del técnico citizen habría servido para preparar de forma minuciosa el choque ante los de Carlo Ancelotti, un equipo que Guardiola ha enfrentado y vencido en varias ocasiones en Europa en los últimos años.
Un plan maestro cocinado con ayuda de Guardiola
El resultado en el marcador no fue fruto de la casualidad. El Arsenal planteó un partido impecable, anulando completamente el juego ofensivo del Real Madrid y sacando el máximo partido a la velocidad y la intensidad de sus atacantes. En este contexto, no es descabellado pensar que parte de la estrategia viniera influida por la experiencia de Guardiola frente al conjunto blanco.
Lo cierto es que el Arsenal dominó todas las facetas del juego, desde la presión alta hasta la salida de balón, pasando por la contención del medio campo merengue. Jugadores como Declan Rice o Martin Ødegaard fueron claves, ejecutando a la perfección un plan que desdibujó al Real Madrid. Para muchos, el equipo gunner dio una de sus mejores versiones desde que Arteta asumiera el banquillo.
Arteta, cada vez más maduro y ambicioso
Este triunfo no solo acerca al Arsenal a las semifinales de la Champions League, sino que confirma la evolución de Arteta como técnico de élite. Su humildad para pedir consejo y su capacidad para adaptarse a distintos contextos tácticos reflejan un entrenador en constante crecimiento, que no se conforma con competir, sino que quiere ganar. La manera en la que ha construido al equipo londinense, combinando juventud con experiencia, ha convencido tanto a la afición como a la crítica.
Además, la sinceridad de Arteta al reconocer la influencia de Guardiola demuestra su mentalidad abierta y su deseo permanente de seguir aprendiendo. Este tipo de actitudes explican por qué el Arsenal es hoy uno de los equipos más sólidos de Europa. Si logran confirmar la clasificación en el Santiago Bernabéu, el nombre de Arteta quedará marcado como uno de los grandes protagonistas de la temporada continental.