La actual temporada de MasterChef se volvió tensa como nunca antes durante el episodio de este lunes, cuando Jordi Cruz, calificó de «cobarde» a uno de los concursantes, luego de una polémica en la prueba por equipos.
Este enfrentamiento estuvo cargado de críticas y defensas emocionales, y marcó un punto incómodo en la dinámica del programa y reabrió el debate sobre la ética en la competencia culinaria que se enfrenta a opiniones divididas en redes.
4Un patrón de conducta repetitivo
Aunque MasterChef apenas inicia, no es la primera vez que Víctor genera controversia. La semana pasada, en una prueba eliminación, señaló las decisiones de otro capitán, lo que hizo que Cruz le advirtiera sobre su «tendencia a desmarcarse cuando las cosas salen mal».
El altercado entre Víctor, Ana y Jordi hizo que se reestructuraran las alianzas en la cocina de MasterChef. Ana María se mostró afectada por las críticas, pero recibió apoyo de compañeros como Limin, quien comentó: «Elegirla fue un riesgo, pero quería desafiar al equipo contrario». Por otro lado, ahora Víctor se enfrenta un aislamiento, ya que los demás concursantes dudan de su habilidad para trabajar en equipo.
Los jueces mantienen posturas polarizadas sobre el incidente. Mientras Pepe Rodríguez evitó opinar al respecto, Samantha Vallejo-Nágera agregó un comentario: «En MasterChef, la lealtad es tan importante como la técnica».
El conflicto entre Jordi Cruz y Víctor va más allá de lo culinario. Plantea preguntas incómodas a la audiencia sobre la ética en la competencia de MasterChef: ¿Se valora más la honestidad o la cohesión grupal? ¿Está bien priorizar la estrategia individual sobre el equilibrio del equipo?