Stepehn Curry sufrió una dolorosa noche ante los Rockets en la NBA. El de los Warriors se vio lastrado y limitado para anotar solo tres puntos (fallando siete de ocho triples) para su total más bajo de esta temporada en un juego en el que se encontró totalmente cómodamente. El jugador apenas anotó puntos en una noche que no recordará precisamente.
Porque Stephen Curry no anotó hasta su triple dos segundos antes del primer descanso en su tercer tiro de la noche enfrentándose a una presión constante, si bien repartió siete de sus ocho asistencias antes de la primera medio. Pero las sensaciones no pudieron ser peores, y no solo por su juego, cino también por la derrota de los Warriors ante los Rockets.
Stephen Curry vive una pesadilla: solo tres puntos ante los Rockets
Es así que Stephen Curry, con sus apenas tres puntos, tuvo un partido bastante difícil de aceptar. El cuádruple campeón de la NBA había recibido una técnica por golpear a Alperen Sengun y posteriormente le pitaron una flagrante por impactar con un codo al propio pívot turco mientras intentaba realizar una bandeja.
Como todo jugador cuando va cumpliendo años, Curry también ha sido víctima de esos comentarios al estilo de ‘ya no es el que era‘ o ‘ya no puede hacer lo que hacía‘. Son un clásico, una especie de golpe del tiempo que afecta a casi todos. Pero es que Stephen está hecho de la pasta de las leyendas, y justo por ello no sorprende que en el momento más importante del curso siga teniendo una importancia en la cancha.
Perdió más balones que puntos anotados
Curry, por primera vez en sus 1.022 partidos en su carrera profesional, se quedó en sólo tres puntos habiendo disputado al menos 30 minutos, perdiendo más balones (4) que puntos anotados. En total, Curry falló ocho triples. Aun así, el estadounidense superó a Reggie Miller al convertirse en el vigésimo cuarto máximo anotador de la NBA, con 25.281 puntos.
A lo largo de su trayectoria en la NBA, Curry se había quedado sin anotar en un puñado de partidos en los había sufrido algún problema físico y apenas pasó de los 10 minutos en pista. El 19 de diciembre del año pasado, ante los Grizzlies, sólo metió dos puntos en un partido en el que jugó 24 minutos antes de sufrir una contusión pélvica que le mandó al vestuario.