El FC Barcelona vuelve a estar en alerta ante el interés de dos gigantes del fútbol europeo por una de sus joyas más preciadas: Lamine Yamal. El joven extremo, que a sus 17 años ya se ha convertido en una pieza fundamental para el primer equipo, ha despertado el interés de clubes tan poderosos como el Manchester City y el Liverpool. Tanto Pep Guardiola como Arne Slot han hecho llegar sus intenciones de llevarse al canterano azulgrana, aprovechando la situación económica del Barça y el potencial aún por explotar del jugador.
En el caso del Manchester City, la idea sería convertir a Lamine Yamal en uno de los pilares de su proyecto de futuro, ofreciéndole un entorno competitivo, estabilidad financiera y la posibilidad de pelear por todos los títulos. Por su parte, el Liverpool busca un relevo generacional para su línea ofensiva, especialmente con la salida de Salah, y el nombre de Lamine Yamal encaja perfectamente en el perfil de jugador que buscan, joven, desequilibrante y con proyección internacional. La doble amenaza inglesa ha encendido todas las alarmas en los despachos del Camp Nou.
El FC Barcelona mueve ficha para blindar a Lamine Yamal
Consciente del interés creciente por su joven estrella, el FC Barcelona ya trabaja a contrarreloj en una renovación que garantice la continuidad de Lamine Yamal en el club. La dirección deportiva, con Deco al frente, tiene claro que no puede permitirse perder a un futbolista llamado a marcar una era en el club. Por eso, el plan pasa por ofrecerle un contrato largo, hasta 2030, y con una cláusula de rescisión astronómica, muy por encima de los 1.000 millones de euros.
La idea es similar a la utilizada en su día con Pedri o Gavi, blindar a los jóvenes talentos de La Masia con contratos que no solo los aseguren a nivel económico, sino que también les den estabilidad y protagonismo en el proyecto deportivo. Además, Hansi Flick ya ha pedido al club que priorice esta renovación cuanto antes. Lamine Yamal es presente y, sobre todo, futuro.
El Barça quiere evitar otra fuga dolorosa
En los últimos años, el FC Barcelona ha visto cómo algunas de sus promesas han terminado haciendo las maletas, ya sea por falta de oportunidades o por la imposibilidad del club de competir con ofertas del extranjero. Con Lamine Yamal no quieren repetir errores del pasado.
La afición, por su parte, también reclama un movimiento rápido y contundente. Consideran a Lamine Yamal una bandera de la nueva generación del FC Barcelona, y su salida sería un golpe muy duro para el barcelonismo. El club tiene claro que debe actuar ya para disipar cualquier duda sobre su futuro.