Supervivientes 2025 está siendo cuesta arriba para los concursantes. Mientras algunos luchan por adaptarse a las duras condiciones del reality y de Honduras, en general, una de las integrantes; también exconcursante de La isla de las tentaciones, activó ayer sábado el protocolo de abandono. Con solo 25 años y luego de semanas en el reality, su decisión de dejar el programa se debe a las condiciones extremas, el hambre y el no saber de su gato.
Supervivientes 2025 es un programa que premia la resistencia, sin embargo, expone los límites humanos de manera abrupta. El caso de la concursante, quien se marcha entre lágrimas, indigestiones y presiones grupales, cuestiona hasta qué punto se puede justificar el entretenimiento por encima del desgaste físico y emocional de los participantes.
5Rosario, Beatriz, Terelu y el costo emocional del reality
Rosario no es la primera en abandonar en esta edición del reality de Telecinco. Beatriz Rico fue la primera en irse a los dos días de comenzar el programa por presentar insomnio, y Terelu Campos se marchó a los 18 días de programa, alegando que había llegado «al límite de sus fuerzas».
Terelu, en particular, antes de irse, ha dejado una reflexión que ha tenido eco en el programa y la audiencia: «No podía ser un lastre. En la medida que he podido lo he hecho». Una frase que conecta también con la situación de Rosario, quien pudo sentir que su debilidad física perjudicaba al equipo.